Mossos denuncian que se "limita" su actuación ante manifestaciones violentas

"No es casual que, de manera constante y progresiva, se limite cada vez más la capacidad de actuación de las unidades de orden público. La finalidad es esta: poder actuar violentamente y con más tranquilidad, durante más tiempo". Así de contundente se muestra el Sindicat de Policies de Catalunya (SPC) tras los disturbios en las protestas contra las últimas restricciones del Govern para frenar el Covid-19.

Desde la organización de agentes exigen que las entidades proderechos humanos, que "impulsan modificaciones" sobre dichas unidades --como la inclusión del número de identificación en el casco y la parte trasera del chaleco, que promovieron Irídia y Amnistía Internacional--, también condenen "de manera firme" la violencia que diversos manifestantes ejercen contra los policías, como "condición irrenunciable para continuar escuchándolos".

Violencia contra la policía

Se dirigen así al conseller de Interior, Miquel Sàmper, y al resto de integrantes del Govern, a quienes indican: "La realidad es que cuando se ejerce violencia contra la policía, la propiedad pública o privada, nunca vemos una condena firme por parte de estas organizaciones y colectivos. Curioso, ¿no?", ironiza SPC a través de un comunicado.

Un contenedor arde en el centro de Barcelona durante los disturbios generados tras una manifestación contra las restricciones del Govern / PABLO MIRANZO

Señala así el sindicato de agentes que el pasado viernes, "una vez más, todo el mundo pudo observar cómo se aprovecha cualquier manifestación como excusa para ejercer la violencia". Y es que dicha protesta, contra el cierre perimetral de Cataluña y sus municipios, se saldó con una veintena de mossos y efectivos de la Guardia Urbana heridos, así como destrozos en vehículos policiales. También con la quema de contenedores, destrozos en mobiliario urbano y dos comercios saqueados en Barcelona.

"Impunidad" tras los disturbios

Unos hechos que, para la organización de policías, trasladan "la sensación de impunidad con la que actúan los violentos". Denuncian por ello que la limitación de la capacidad de actuación de los efectivos de orden público deriva en que los responsables de los altercados puedan actuar con "más tranquilidad", y que tras dichas limitaciones se encuentran las entidades a las que exigen condenar los disturbios. 

Por su parte, Sàmper ha asegurado que "investigarán y perseguirán a los que han practicado la violencia extrema en vía Laietana y calles adyacentes" el pasado 30 de octubre, y que no habrá "ninguna concesión a quienes buscan la desestabilización practicando la violencia extrema en un momento tan crítico en la lucha contra el Covid-19".