Turistas hasta en el salón: llega la 'app' de los botellones en casa
Barcelona, primera ciudad española en la que desembarca Comehome, la polémica plataforma italiana para montar juergas a domicilio
28 julio, 2019 00:00Treinta personas, un piso del barrio de Poblenou de Barcelona y barra libre. Como reza el tópico, ¿qué podría salir mal? Con estas tres promesas se anuncia Comehome, la polémica aplicación italiana de reuniones y juergas a domicilio. Su estreno en España será el viernes, 2 de agosto, en la ciudad condal.
El primer evento de Comehome en España se anuncia discretamente: como fiesta secreta. Requiere inscripción previa para sumarse a la "comunidad". El anzuelo para engrosar la lista de fiesteros a domicilio es un evento con 30 personas y barra libre. Tras contactar este medio con la aplicación en dos ocasiones, "todo lo que puedas beber" cambia a un sobrio open bar. ¿Invaden los turistas el salón de casa? "No. Es una plataforma para crear comunidad, sobre todo para expatriados. La gente vive muy sola en la ciudad y necesita conocer gente", defiende en conversación con este medio su cofundador y director de operaciones, Danielle Chierchia. ¿Sabe que en Cataluña anunciar un all you can drink (todo lo que puedas beber) está prohibido desde 2009, cuando el Govern trató de frenar --en vano-- el turismo de borrachera? "No lo sabíamos. Se ha quitado. Lo llamamos open bar porque no hay transacción económica", sostiene.
"Es una 'app' vital y cultural"
Chierchia hilvana una exposición telefónica que trata de alejar su producto de las vacaciones regadas en alcohol. "La gente usa la app para fines culturales. Se programan veladas para amantes de la fotografía, barbacoas o noches en casa para ver una película", enumera el emprendedor. ¿Por qué pues traer licores? "Porque no se puede vender en un piso privado. Sería ilegal", razona. No menos sospechosa es la política de convivencia y buen comportamiento de Comehome. Cuando el día 2 de encaje a 30 personas en un piso, ¿cómo se garantizará el respeto al vecino? "Hacemos una criba previa de gente. La queremos conocer y le explicamos el sentido de la app. Y al final el responsable de todo es el organizador", señala el directivo.
Según el joven, que revela que Comehome está en modo prueba en España, su criatura aporta valor a las ciudades. "La gente llega a trabajar a una plaza y no conoce a nadie. La app simplemente los pone en contacto con personas que comparten sus mismas inquietudes. O con las que quieren tomar una copa antes de salir", expone. ¿A qué se refiere? "Si uno sale solo a bailar a una ciudad que no conoce, acabará la noche solo. La gente a menudo sale en grupo. Pues Comehome evita estas situaciones. Sirve para conocer a gente antes de la discoteca o el bar", admite. ¿No es competencia desleal? "No. Incluso aportamos un flujo de clientes a los clubes y pubs", indica.
Fecasarm: "Un piso no es un bar"
El desembarco de la app de botellones a domicilio a Barcelona no ha gustado nada a Fecasarm. La patronal de locales de ocio nocturno cree que Comehome supone "competencia prohibida por ley", pues los domicilios no pueden albergar soirées regadas de alcohol. Lo prohibe la ley autonómica de Espectáculos. "Un piso no es una discoteca o un bar. Se pueden celebrar solo encuentros de tipo familiar. Está regido por ley. No se permiten hacer fiestas, porque un domicilio no cumple con las condiciones mínimas. No está insonorizado, no es accesible, no tiene baños adaptados o salidas de humo o emergencia", recuerda el empresario. Recuerda Boadas que "los locales de ocio pasan inspecciones y se someten a normativas diversas" por lo que "no es de recibo que alguien transforme su casa en un bar".
El ejecutivo anuncia que Fecasarm "vigilará muy de cerca que la app no se convierta en una plataforma para organizar fiestas". Añade Boadas que la administración "debería hacer lo propio y ejercer vigilancia para que ello no ocurra. Y si es preciso, sancionar a la empresa que hay detrás".
Fecalon: "Vuelven los guateques de los 70"
Una opinión igualmente crítica manifiestan desde Fecalon. Esta organización de empresarios de ocio nocturno cree que aplicaciones como Comehome "suponen un regreso, esta vez digital, a los guateques en casa de los años 70 en España". A juicio de un portavoz de la entidad empresarial, ello ocurre "por las incontables trabas con las que se encuentan los restaurantes y locales de copas". ¿Cuáles? "A las prohibiciones de fumar, a la guerra que libran algunos ayuntamientos y el Gobierno catalán contra las terrazas, con sanciones y el cierre cada vez más temprano, o la cantidad menguante de bares musicales y discotecas que hay en los centros urbanos", ilustra un portavoz. Según él, "durante la crisis ya notamos la tendencia a gastar menos en ocio nocturno porque arreciaron los botellones. El siguiente paso era que se organizaran por internet o móvil".
La llegada de Comehome a Barcelona es solo una muestra de la nueva coexistencia de usos en espacios a los que antes los visitantes estaban vedados. A este respecto, cabe recordar que la asociación vecinal Illa RPR denunció recientemente la proliferación de aplicaciones, como Atiko.com, para montar parrandas en terrazas y áticos que se alquilan por un día. Según esta agrupación, ello es muy nocivo porque enfrenta el uso residencial con el lúdico, con el consiguiente deterioro del descanso vecinal y la salubridad de las fincas.