Vecinos del Raval dan un ultimátum sobre la droga en el barrio

Ultimátum de los vecinos del Raval sobre la crisis de la droga que castiga a este barrio de Barcelona. Vecinos, entidades, instituciones, centros educativos y oenegé han dado el bocinazo de alerta hoy lunes, 9 de julio, sobre la “preocupante” situación de la zona.

En una concurrida de prensa en la antigua Escuela de Diseño Massana de Barcelona, hasta 80 entidades que representan al tejido asociativo del área han emplazado a Ayuntamiento, Generalitat de Cataluña y Gobierno a “coordinarse y trabajar juntos” para remediar un problema “complejo, y que se está agudizando en los últimos meses”.

"Enquistamiento y cronificación"

Según los firmantes, que van desde el Casal d’Infants hasta el Macba, pasando por los comerciantes del Mercado de la Boquería o la UGT, el conflicto de la droga en el Raval “ha ido a peor en los últimos meses, con el concurso de organizaciones criminales internacionales”.

Ello requiere, según residentes y entidades, de una “respuesta entre todos”, pues “ni el Ayuntamiento de Barcelona puede hacerlo en solitario, ni puede la Generalitat”, ha argumentado Enric Canet, director de relaciones institucionales del Casal d’Infants. De lo contrario, hay riesgo de “enquistamiento y cronificación” del consumo de estupefacientes.

“Que no sea arma electoral”

Los firmantes del manifiesto han conminado a los partidos políticos con representación en el consistorio a “no hacer de los problemas del Raval una arma electoral”. Bajo su punto de vista, hay que dejar al barrio “fuera de las confrontaciones partidistas” a menos de un año de las elecciones municipales.

Por el contrario, sí exigen que las tres instituciones “se coordinen en un esfuerzo mancomunado”, que debería plasmarse en políticas efectivas en el casco antiguo de Barcelona. Esta demanda requiere de “una movilización de todos los recursos necesarios para prevenir y erradicar esta situación”.

El Raval en pleno

Asimismo, el Ejecutivo local de Ada Colau, el autonómico de Quim Torra y el Gobierno deberían “combatir los narcopisos” y luchar contra la gentrificación –esto es, la expulsión de los vecinos—como parte de un compromiso con el barrio y la ciudad. También se les pide “reforzar los recursos para atender a las personas consumidoras de droga” y a su situación de “extrema vulnerabilidad”.

Las peticiones llevan la firma de un amplio espectro asociativo y vecinal del Raval. Se cuentan entre los apoyos el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB), Amics de la Rambla, asociaciones de comerciantes, el Centro Islámico Camino de la Paz, las facultades de la Universidad de Barcelona (UB) con sede en esta zona o el Gran Teatre del Liceu, entre otros.