La prisión Modelo hierve en vísperas de su traslado
Los empleados aseguran que los intentos de fuga y las tensiones internas responden al miedo de los presos a salir de Barcelona
15 marzo, 2017 00:00La prisión Modelo de Barcelona está desde hace unos meses en boca de todos. Aún más esta semana después de los dos intentos de fuga del pasado viernes y de ayer martes.
La Generalitat ya ha mostrado sus cartas abiertamente. Liquidar el centro penitenciario de la calle Entença del centro de la ciudad para convertirlo en un colegio público a partir de septiembre. Además, el Gobierno autonómico quiere entregar las llaves al ayuntamiento en junio, una vez haya abandonado la cárcel el último recluso.
"No" rotundo al traslado
Tras esta decisión unilateral, las respuestas poco tardaron en llegar. Primero, fueron los mismos presos los que reivindicaron sus derechos con una recogida de firmas, que entregaron al Síndic de Greuges, para no ser trasladados.
Los sindicatos también han alzado la voz. El coordinador de Acaip, Francesc López, indica que ya han presentado una denuncia ante la fiscalía para evitar el cierre exprés de la cárcel más antigua de Cataluña. Además, asegura que la Modelo aún está en condiciones de aguantar “al menos cinco años más”. “No tiene las instalaciones más modernas, pero puede estar en pleno funcionamiento”, señala.
Palabras que chocan con las del conseller de Justicia, Carles Mundó, que hace tan solo un par de semanas advirtió de que la instalación "se cae a trozos”, y que para invertir en su modernización, se deberían emplear más de 25 millones de euros.
Los sindicatos de trabajadores del centro penitenciario aseguran que es “absurdo cerrar el centro de preventivos”. “No tiene ningún sentido cuando aún no se ha puesto ni una piedra” en los terrenos de la Zona Franca.
Nerviosismo en las celdas
Desde Acaip cuentan a Crónica Global que la Administración no tiene en cuenta la personalidad, la familia, y las características del preso. “Lo único que sabemos es que les van a sacar de Barcelona, tanto a ellos como a nosotros los empleados”, lo que desencadena en “situaciones de nerviosismo”.
Para la Generalitat, el cierre de la Modelo tiene un sentido: enviar a los presos a cárceles mejor acondicionadas en Tarragona, y a las dos de Brians en la comarca del Baix Llobregat, situadas a una hora de Barcelona. Justicia prevé que los residentes se instalen en estas celdas hasta que estén listos los centros penitenciarios de la Zona Franca, que según los planes de obras será en 2025.
Los sindicatos, en palabras de López están “de acuerdo” con este traslado, pero siempre y cuando se asuma “en las mejores condiciones”.
Además de todo lo que ha tenido difusión en la prensa, López explica que están siendo semanas duras en el seno de la prisión del Eixample. “Los presos están muy asustados y nerviosos” por la situación de indefinición que se está viviendo. “Algunos de ellos están más violentos de lo normal, y otros han venido llorando a pedirnos que no los trasladen” para sacarlos fuera de la ciudad.
Un incendio sin repercusión
El coordinador de Acaip explica que el pasado lunes se produjo un incendio en la prisión, que finalmente no tuvo que lamentar ningún daño. “Tuvimos que desalojar parte de las celdas y algunos espacios” en una situación de la que pocos se han interesado.
López, como empleado de la prisión muestra entusiasmo por formar parte de un equipo de “profesionales”, que esta semana ha lidiado con situaciones adversas que no suelen producirse, y además en un momento de mayor nerviosismo.
En la actualidad en la Modelo residen 970 presos, la mayoría de ellos se encuentran allí por delitos menores, pero también hay algunos violentos que “pueden suponer un problema para la ciudadanía” y que se “deben controlar”.