Peritos judiciales: rigor técnico al servicio de la verdad

En el sistema judicial, las pruebas objetivas y la interpretación experta de los hechos adquieren un carácter decisivo para alcanzar resoluciones judiciales justas. De ahí que el perito judicial ocupe un lugar esencial cuando se trata de traducir al lenguaje jurídico datos científicos, médicos, técnicos o psicológicos. El perito no sólo aporta saber especializado, sino que también respalda la integridad técnica del proceso.

En el ordenamiento español, la actuación pericial no requiere de forma obligatoria la colegiación. Tanto el perito judicial como el perito privado pueden ejercer sin necesidad de colegiación oficial alguna, tal como establecen los arts. 335 y siguientes de la Ley de Enjuiciamiento Civil y los arts. 456 y siguientes de la Ley de Enjuiciamiento Criminal. Esto hace que, para quienes se dedican plenamente al ejercicio pericial, resulte más coherente inscribirse en un colegio corporativo especializado en peritajes o en una asociación, que en un colegio profesional oficial cuyo ámbito esté alejado de la práctica pericial directa.

En todo caso, existe una necesidad clara de estructuras profesionales que velen por la calidad de los dictámenes. El Colegio Corporativo de Peritos Judiciales es el organismo que impulsa la excelencia en el ámbito forense y penal. En este artículo conoceremos la utilidad de esta institución y la labor realizada por uno de los profesionales más destacados en el ámbito del peritaje, Carlos Cuadrado Gómez-Serranillos.

La labor del Colegio Corporativo de Peritos Judiciales

Esta institución promueve estándares éticos, metodológicos y formativos para que la prueba pericial cumpla los cánones requeridos por la justicia contemporánea. No se limita a la promoción de la profesión, sino que agrupa, instruye y respalda al perito, de suerte que su intervención contribuya con certeza al esclarecimiento de la verdad judicial.

Su misión institucional no se limita a defender a sus asociados, sino a asegurar que cada informe pericial elaborado por los miembros del Colegio se ajuste a criterios irrenunciables de calidad, objetividad y claridad. No basta con poseer el conocimiento; es imperativo articularlo con un discurso responsable, preciso y accesible.

Perito Decano del Colegio

El título de Perito Decano no es un mero reconocimiento honorífico. En el Colegio Corporativo implica asumir la responsabilidad de guiar a otros peritos, revisar informes y garantizar que cada dictamen que lleve su sello esté respaldado por metodología, precisión técnica y solidez argumental.

En este ámbito, Carlos Cuadrado Gómez-Serranillos encarna el paradigma que se pretende alcanzar. No es habitual encontrar en un solo profesional la mirada analítica de un criminólogo, la precisión de un médico forense, la estrategia de un abogado penalista y la sensibilidad de un psicólogo.

Carlos Cuadrado Gómez-Serranillos, recientemente nombrado Perito Decano del Colegio Corporativo de Peritos Judiciales, encarna esa rara convergencia.  Su trabajo no empieza en la sala de vistas ni termina con la firma de un informe. Lo mismo puede estar analizando las trayectorias de un proyectil que reconstruyendo el contexto psicológico de un testigo clave. Y lo hace con una convicción firme: “La verdad no se negocia; se documenta y se demuestra”, afirma.

La labor de Carlos Cuadrado

En los últimos años, el Dr. Cuadrado Gómez-Serranillos ha participado en casos que han redefinido estrategias de defensa penal en España. Desde autopsias privadas que desmontaron conclusiones oficiales, hasta peritajes psicológicos que acreditaron perjuicios morales graves, su firma ha sido sinónimo de un enfoque integral y multidisciplinar.

Dirige el proyecto PsychoCrime, que combina criminología, psicología forense y análisis de la escena del crimen, y mantiene el despacho doctorcuadrado.com, desde donde atiende casos en todo el territorio nacional.

Su trayectoria incluye intervenciones en procedimientos mediáticos, pero también en causas discretas en las que la confidencialidad y la técnica han marcado la diferencia.

Más allá de los titulares, lo que distingue a este decano es su capacidad de integrar ciencia y derecho para aportar pruebas sólidas, comprensibles y útiles para jueces y jurados. “Un informe pericial no es literatura técnica para expertos; es una herramienta para que quien debe decidir, lo haga con información clara y verificada”, explica.

La importancia de comunicar

Por otra parte, un reto con el que se encuentra el perito judicial en la actualidad es saber comunicar. Un informe puede ser riguroso en su contenido, pero si no se organiza de forma transparente y lógica, su capacidad de influencia se desvanece. Esta exigencia de claridad, que conoce perfectamente el doctor Cuadrado, es una de las habilidades que el Colegio cultiva en sus actividades docentes.

El perito judicial es más necesario que nunca

En suma, el perito judicial ya no es un experto solitario que aguarda instrucción. En la actualidad, reclama profesionales que, además de tener conocimientos, sean éticos, comunicadores y multidisciplinares, capaces de ofrecer un valor tangible en el proceso judicial. El Colegio Corporativo de Peritos Judiciales, bajo la dirección de Carlos Cuadrado, consagran un modelo de pericia riguroso y decididamente comprometido con la verdad.

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