El Govern en funciones ha arrancado la campaña con una soberbia demostración de hasta dónde llega su limitada competencia y donde comienza su exuberante incompetencia. La gestión del conflicto con los funcionarios de prisiones es toda una exhibición. He ahí a don Amand Calderó, al que los sindicatos señalan como el conserje del Gran Hotel Lledoners del presos polítics, también apodado El secretari, que no se apea del cargo ni por el asesinato de una funcionaria, la cocinera de la cárcel de Mas d'Enric, Nuria López. Tampoco dimite Gemma Ubasart, antaño podemita y ahora consejera de Justicia de ERC, no vaya a ser que alguien crea que en el Govern de don Pere Aragonès se asumen responsabilidades. Eso nunca. Vade retro.
Total, si no ha pasado nada. Un preso condenado por el asesinato de una mujer a cuchilladas a solas con otra mujer en una cocina llena de cuchillos. Lo típico en una cárcel catalana. La cuestión es que cuatro mil presos han quedado confinados mientras los funcionarios de prisiones bloquean los accesos a las prisiones y los Mossos reparten leña. Edificante espectáculo sobre el que don Pere no tiene nada que decir. Que hablen Patrícia Plaja y la señora Ubasart, ¿verdad?
Lo extraordinario es que no ocurran más desgracias en el territori donde altos funcionarios como el señor Calderó ensayan las más modernas teorías sobre la seguridad ciudadana, la prevención de los delitos, el sistema penitenciario, el tratamiento a los presos, sus permisos y demás. Todo desde una perspectiva no punitiva chupiguay.
Aquí, en Crónica Global, la pieza dedicada a este disparate es de Sara Cid. "Los funcionarios de prisiones echan un pulso al Govern en funciones: “O caen ellos, o caen las cárceles”" es el titular del texto, que arranca así: "Los funcionarios de prisiones echan un pulso al Ejecutivo de Pere Aragonès a las puertas de las elecciones autonómicas, convocadas en mayo de forma anticipada. Tras el asesinato de Núria, cocinera de Mas d'Enric -la cárcel de Tarragona- a manos de un preso el pasado miércoles, los trabajadores de la Administración Pública han anunciado que continuarán bloqueando todas las prisiones catalanas hasta que la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y el número dos del departamento, Amand Calderó, presenten su dimisión. “O caen ellos o caerán los centros penitenciarios, pero nosotros no pararemos”, advierten los funcionarios consultados por Crónica Global".
Sigue la nota: "Hasta entonces se niegan a entablar conversación alguna con la Consejería de Justicia. Así lo demostraron ayer lunes, cuando dieron plantón hasta en dos ocasiones a los responsables del departamento. Mientras tanto, Ubasart y Calderó se aferran a sus asientos y culpan a los funcionarios de la tensión dentro de las prisiones. La postura de la consellera ha despertado discrepancias dentro del propio Govern, según ha podido saber este medio, pues algunos de los pesos pesados de ERC consideran que les perjudicará en los comicios del próximo 12 de mayo".
Y: "La situación es crítica en las prisiones catalanas. En Brians 1, Wad Ras, Lledoners, Mas d’Enric, Puig de les Basses y Ponent unos 4.000 internos permanecieron encerrados en sus celdas durante todo el lunes, provocando “mucho nerviosismo” entre la población reclusa, pues ya estuvieron confinados el viernes. En Lledoners (Barcelona) la tensión se palpaba en el ambiente ya la noche del domingo, cuando los presos supieron que el lunes no saldrían a las zonas comunes. Con ese escenario, la dirección se vio obligada a ponerse a repartir las cenas para intentar templar los ánimos de los reos, ante la falta de funcionarios, que se negaron a acceder a sus puestos de trabajo hartos de las condiciones en las que trabajan y de ser la diana de agresiones cada vez más violentas. “La directora, el subdirector y los técnicos jurídicos se pusieron a abrir y cerrar puertas para entregar las bandejas de la comida y las medicaciones”, sostienen las voces consultadas".
La directora y el subdirector repartiendo el rancho... El Govern se está luciendo. Cada minuto que pasa sin que se resuelva la crisis es una paletada de tierra sobre las opciones de Aragonès de repetir mandato. De momento y según El Periódico, los resultados de las elecciones serían estos: PSC, 35/38 (23,8%); Junts, 29/32 (18,5%); ERC, 29/32 (18%); PP, 12/14 (10%); Comuns, 7/9 (7%); Vox, 7/9 (6%); CUP, 7/9 (5,9%); Aliança Catalana 0/3 (2,9%).
De modo que el independentismo podría gobernar perfectamente, pero no sería con el candidato republicano como presidente. Por cierto, en Junts nadie dice nada sobre Calderó. Al final va a ser verdad eso que van diciendo los sindicatos de que al ínclito Amand le deben muchos favores nuestros héroes del 'ho tornarem a fer'.
La semana pasada, nada más conocerse el adelanto electoral, Puigdemont, Boye, Rull, Turull y la señora Borràs dieron por descontado que el hombre de Waterloo sería el cabeza de cartel de la lista de Junts. Pero ahora resulta que se ha desatado una especie de incertidumbre sobre tal cuestión y no se sabe si es porque los periodistas ese día estaban a otra cosa o porque tratándose de Puigdemont cualquiera sabe lo que puede ocurrir. "El líder de Junts organiza una conferencia en el Ayuntamiento de Elna para escenificar si acepta el encargo de su partido", apunta al respecto El País. El texto viene con la firma de Marc Rovira: "El presidente catalán, Pere Aragonès, ha firmado este lunes el decreto de convocatoria de elecciones para el 12 de mayo y Carles Puigdemont ha anunciado su intención de poner fin a la incógnita sobre su futuro electoral en una conferencia que ofrecerá el jueves en Elna, población del sur de Francia. Junts per Catalunya tiene previsto presentar a Puigdemont como candidato para las elecciones catalanas y el expresidente, pese a que no avanza qué va a comunicar, reviste de formalidad y protocolo su comparecencia. “Nos fuimos al exilio por las mismas razones por las que vamos a regresar; el futuro de nuestra nación y no nuestro destino personal ha inspirado todas las decisiones”, ha manifestado Puigdemont en un escrito en su habitual canal de comunicación, la red social X".
Sigue Rovira: "“El hilo rojo que ha marcado mi compromiso político se ha mantenido indeleble pese a las adversidades que he tenido que confrontar desde hace ocho años, especialmente duras desde hace seis años y medio”, razona Puigdemont en su nota. Pone así de relieve el supuesto compromiso político que adquirió al tomar posesión del cargo de president, en enero de 2016, y las peripecias que ha afrontado desde que, en octubre de 2017, se marchó a Bélgica para evitar ser juzgado. “De todo esto más quiero hablar este jueves en Elna, en una conferencia abierta a todo el mundo”, subraya Puigdemont".
Y: "Jordi Turull, secretario general de Junts, ha insistido en que Puigdemont es el candidato preferido por el partido para tratar de presentar batalla en unas elecciones catalanas donde el líder del PSC, Salvador Illa, arranca con ventaja, según las encuestas. En el caso de que Puigdemont sea finalmente el cabeza de cartel de Junts, tendrá muy complicado hacer campaña electoral presencial, porque la ley de amnistía aún no habrá desplegado efectos. Por lo pronto, no está previsto que sea efectiva hasta la segunda mitad de mayo. Junts, y el propio Puigdemont alimentan la idea de que los plazos sí cuadran para estar presente cuando se fije la fecha del debate de investidura del próximo presidente catalán".
En la contraparte, "Ciudadanos acepta diluirse en una lista del PP si incluye al constitucionalismo", destaca El Mundo. En el subtítulo se explica que "Los 'naranjas' ya asumen la absorción siempre que se cierre "un frente amplio" que trascienda las siglas y que se cite en la papeleta electoral". Escribe Juanma Lamet: "Aún no hay fumata blanca, pero las negociaciones avanzan. El PP y Ciudadanos siguen hablando sobre cómo «integrar» a los naranjas en sus listas para las elecciones catalanas del 12 de mayo y europeas del 9 de junio. Los equipos negociadores, que lideran los secretarios generales de ambos partidos, Cuca Gamarra y Adrián Vázquez, guardan silencio casi total sobre los puntos calientes de la negociación. Eso sí, ambas partes han enfriado un poco las expectativas de un acuerdo inminente. Fuentes tanto de Ciudadanos como del PP aseguran a este diario que el pacto no parece tan inminente, y remiten a la fecha tope para la presentación de candidaturas, a final de mes. Eso sí, otras fuentes conocedoras de los pormenores de la negociación aseguran que la integración bajo las siglas del PP no es ya una línea roja para Ciudadanos, siempre que la marca que se presente a las elecciones catalanas trascienda esas dos siglas e incluya a todo el espectro constitucionalista que ha venido orbitando alrededor de populares y naranjas. Y viceversa. Es decir, si en vez de ser PP de Cataluña, la candidatura es Partido Popular y Constitucionalistas de Cataluña, por poner un ejemplo obvio, ya no habría problemas".
Sigue Lamet: "Fuentes de Génova rechazan cambiar sus siglas lo más mínimo, pero muestran disposición al acuerdo: «Queremos que vengan, tenemos una historia que contar juntos a los españoles y los catalanes. Entendemos que quieran reivindicar lo que han sido, pero tienen que asumir una realidad concreta. Podemos hacer algo muy bonito juntos». ¿Por qué Cs estaría, según estas fuentes, dispuesto a renunciar a sus siglas? Porque sus dirigentes son conscientes de que sus expectativas demoscópicas para las catalanas y las europeas son igual de malas. En ambas citas las encuestas les auguran cero escaños".
En lo que es propiamente el PP de Cataluña, Alejandro Fernández pugna por repetir como candidato disipando los recelos, dudas y desconfianza que suscita en Génova 13. En La Razón explica Carmen Morodo que Fernández tiene muchos puntos a su favor por razones circunstanciales, pero que Feijó será el "candidato en la sombra" tanto en Cataluña como en el País Vasco. De su crónica: "El adelanto por sorpresa de las elecciones en Cataluña acorta el margen de la dirección del Partido Popular para activar en esa comunidad autónoma un congreso regional de cambio. Esa es la idea con la que el equipo de Alberto Núñez Feijóo aterrizó en Madrid cuando llegó a la Presidencia del partido, pero de la misma manera que resolvió esa renovación con diligencia en el País Vasco, en Cataluña, sin embargo, el tiempo se les ha echado encima y juega como un factor a favor de su actual líder regional, Alejandro Fernández, que siempre ha mostrado sus resistencias a dar un paso al lado. La negociación con Ciudadanos para ir de la mano en estas elecciones catalanas del próximo mes de mayo es otro factor que se cruza en los planes de Génova. Dicen oficialmente que esa negociación no está todavía resuelta, pero que avanza, y el escollo reside más en el reparto de puestos que en las diferencias programáticas".
Y: "De todas formas, la precampaña y la campaña en estos dos territorios tendrá como principal protagonista al líder nacional del partido. Tanto que en el comité de dirección popular hablan de él como el «candidato en la sombra» porque su perfil siempre ha tenido mejor acogida que el de otros dirigentes nacionales. Esto le viene de Galicia y de su gestión al frente de la Xunta, con una sensibilidad territorial que el PP trata de imprimir ahora en su programa electoral sin caer en contradicciones con el mensaje nacional que exhiben. (...) Además, en este contexto nacional, con la proyección del ruido de Madrid y de todo lo que tiene que ver con la amnistía y el regreso de Carles Puigdemont, hay poco margen para disociar la figura y el discurso nacional del territorial. La llave será presentarse como el único partido que defiende con claridad la Constitución, pero éste tampoco es un mensaje que sea especialmente ilusionante en ninguno de estos dos territorios en liza. Por eso el argumentario del PP incluirá la idea de que ya ha llegado el momento de alejarse del debate «obsesionado con lo que somos para centrarnos más cada día en lo que necesitamos como pueblo»".
19 de marzo, santoral: José.