Máxima urgencia para el catalán en el Congreso
Las lenguas cooficiales ya se podrán usar en la cámara baja durante la sesión de investidura de Feijóo. Yolanda Díaz traslada que el acuerdo con Puigdemont está hecho
7 septiembre, 2023 07:36Velocidad de crucero en el Congreso de los Diputados. PSOE y Sumar despliegan una intensa actividad parlamentaria para satisfacer la introducción de las lenguas cooficiales en la cámara baja. Cambio de paradigma parlamentario. Rapidez frente a burocracia. El "sí se puede" trasladado a los farragosos trámites. Fuera comisiones en favor de la lectura única ante el pleno. Es el caso de la cuestión lingüística, a la que la presidenta del Congreso, la señora Francina Armengol ha impreso el sello de urgente. Se pretende que la sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo quede marcada por el uso del catalán, gallego y vasco (y el aranés también) en la sede de la soberanía nacional.
El País saluda los trabajos con este titular: "El acuerdo sobre las lenguas en el Congreso apuntala la nueva mayoría mientras Junts reclama que la ley de amnistía esté aprobada antes de la investidura". Puigdemont tiene prisa. Resulta que ahora es un estajanovista de la celeridad. En el sumario del titular se explica que "Las piezas van encajando para los 178 escaños que necesita Sánchez, pero el alivio penal es la clave". Escriben Carlos E. Cué y Camilo S. Baquero: "Poco a poco, las piezas para construir una nueva mayoría de 178 escaños que dé paso a la investidura de Pedro Sánchez van encajando, aunque aún queda mucho camino por recorrer y hasta el último minuto todo puede descarrilar. Después del primer gran paso, el 17 de agosto, cuando Junts se sumó a la mayoría de la pasada legislatura --PSOE, Sumar (antes Unidas Podemos), ERC, PNV, Bildu y BNG-- para hacer presidenta a Francina Armengol, este miércoles llegó un segundo muy relevante: todos estos grupos, salvo el que dirige Carles Puigdemont, estamparon su firma en una proposición de ley para reformar el reglamento y permitir por primera vez en la democracia española que se puedan usar en el Congreso de forma generalizada las tres lenguas cooficiales que conviven en España con el castellano: el catalán, el gallego y el euskera. Junts no puso su firma en una cuestión que han exigido ellos mismos, con ERC, como forma de mostrar que aún no está en esa mayoría de 178 porque tiene que negociar con el PSOE sobre la base de las líneas que marcó el expresidente catalán fugado en Bruselas Carles Puigdemont el martes, pero sí apoyará la iniciativa y la ha negociado. El PSOE y Sumar logran así, de nuevo, un acuerdo con ERC y Junts dentro, algo muy complicado dada la rivalidad de los dos grupos independentistas, que vienen de romper su coalición de Gobierno en Cataluña".
Sigue la nota: "La reforma, que cuenta con la oposición del PP y Vox --Alberto Núñez Feijóo fue muy claro y dijo que está en contra de “un Congreso con pinganillos”-- se aprobará a toda velocidad con esos 178 escaños --necesita mayoría absoluta, 176-- en menos de dos semanas en un pleno extraordinario por lectura única, con el objetivo de que se pueda estrenar este nuevo sistema en la investidura de Alberto Núñez Feijóo el 26 de septiembre. Allí se podrá hablar en las lenguas cooficiales, y habrá traducción, pero para la siguiente fase, que incluirá que todas las iniciativas puedan también registrarse por escrito en esas lenguas, habrá que esperar seis meses para que el Congreso busque los traductores y engrase el sistema".
Todo esto sucede precisamente cuando la anterior presidenta del Congreso, Meritxell Batet, anuncia su retirada de la política. "El adiós de Batet: una federalista incómoda para el independentismo y que apuntaló a Sánchez con un millón de votos", apunta El Mundo. La glosa de la despedida es de Iñaki Ellakuría en El Mundo: "Durante la campaña del 23-J, en un momento en el que los sondeos daban por hecha una mayoría aplastante del PP, Meritxell Batet, candidata del PSC al Congreso por Barcelona, lanzó un vaticinio que sonó a boutade mitinera, pero que se confirmaría poco después en las urnas: «No vamos a ganar, vamos a arrasar». En efecto, la candidatura del PSC se impuso con rotundidad en Cataluña, con un millón de votos, siendo la primera fuerza en unas generales por primera vez desde el 2008 y convirtiéndose en el factor decisivo para que Pedro Sánchez y su suma con los nacionalistas superaran a PP y Vox. Este resultado fue interpretado como la consolidación de la figura de la todavía presidenta del Congreso, tanto en el PSC --donde no nunca disfrutó de la plena confianza de Salvador Illa, tampoco de su predecesor, Miquel Iceta-- como en el PSOE. Y casi nadie, obviamente, podía imaginar que Batet, tal como anunció ayer, pocas semanas después de aquel éxito electoral iba a abandonar la primera línea política tras dos décadas con cargos institucionales: diputada, ministra, presidenta del Congreso".
Continúa Ellakuría: "En una serie de mensajes en su cuenta personal de Twitter, Batet hizo pública ayer una decisión que, fuentes de su entorno aseguran que ha sido «largamente meditada», en su voluntad de tener una vida menos expuesta a las exigencias físicas y personales del ejercicio de la política --no se descarta que pase a formar parte del Consejo de Estado--. Y que, por lo tanto, no guardaría relación con que Sánchez escogiera a la socialista balear, Francina Armengol, con un perfil ideológico y personal favorable a las tesis nacionalistas de ERC y Junts, como su sustituta al frente de la Cámara. De hecho, después del 23-J, en las negociaciones del Gobierno con los nacionalistas, ERC y Junts vetaron la continuidad de Batet y bendijeron a Armengol. Una condición que aceptó Sánchez sin una mínima objeción y que provocó un silencioso malestar en el PSC y en la propia Batet. Los nacionalistas vengaban así la decisión de Batet --federalista y una de las voces más críticas del PSC con el separatismo--, de negarse en marzo de 2021 a tramitar la proposición de Ley para que se concediera una amnistía a los líderes del procés".
El camino hacia la investidura de Pedro Sánchez parece totalmente desbrozado a tenor de las últimas declaraciones de la vicepresidenta segunda en funciones y líder de Sumar. "Yolanda Díaz: “Después de la conversación con Puigdemont estoy convencida de que va a haber Gobierno progresista”", advierte un titular de El Diario. El texto es de Alberto Ortiz: "Yolanda Díaz está convencida de que podrán repetir un Gobierno de coalición progresista con el Partido Socialista. El lunes acudió a Bruselas para reunirse allí con Carles Puigdemont y después de ese encuentro ve esa posibilidad más cerca, tal y como ha trasladado este miércoles en un foro del Partido Demócrata en Italia. “Después de la conversación con el señor Puigdemont estoy convencida de que va a haber Gobierno progresista en España”, ha afirmado".
Sigue la pieza: "El pasado lunes los dos se reunieron en Bruselas, en un encuentro que anunciaron poco antes de que se celebrase y en el que también estuvieron el dirigente de los comuns Jaume Asens y el eurodiputado Toni Comín. Después de la reunión, las dos partes no dieron muchos detalles sobre las conversaciones pero trasladaron un comunicado en el que manifestaban un acuerdo para “explorar todas las soluciones democráticas para desbloquear el conflicto político”. Aunque varias personas del núcleo duro de la vicepresidenta segunda han trasladado las sensaciones de Sumar tras esa reunión, como los portavoces Ernest Urtasun y Marta Lois o el propio Asens, Díaz no se había pronunciado hasta ahora sobre el encuentro. Preguntada por este asunto en un encuentro junto a los diputados italianos Elly Schlein y Andrea Orlando, la líder de Sumar se ha mostrado convencida de que habrá “gobierno progresista”. “Tenemos que ver Catalunya no como problema sino como una auténtica oportunidad. Como un país diverso, con distintas culturas, maneras de hacer política. Toda esta riqueza nos hace mejores. Creo que sí vamos a tener gobierno progresista en mi país”, ha sostenido".
Todo el mundo tiene prisa y en La Razón titulan que "Moncloa presiona para pactar con Puigdemont antes del 26S". El sumario tiene aún más enjundia: "El expresidente catalán traslada a su entorno que el acuerdo está cerrado y que Yolanda Díaz le dijo que iba en nombre de Sánchez". Escribe Carmen Morodo: "Moncloa está moviéndose con celeridad, y presionando a sus socios para que colaboren, porque quiere tener cerrado un acuerdo con el independentismo, cueste lo que cueste, para el 26 de septiembre, es decir, para la fecha en la que tiene que celebrarse la sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo. Tras el encargo del Rey a Feijóo, siguiendo la costumbre de escoger al candidato más votado, la presidenta del Congreso, Francina Armengol, acordó con el líder del PP fijar el Pleno para someterse a la confianza del Parlamento para los días 26 y 27 de septiembre, siendo la segunda fecha cuando debe tener lugar la primera votación. De no tener la mayoría absoluta, la segunda votación se celebrará el viernes 29, y al candidato popular le valdría con más síes que noes".
Continúa Morodo: "El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha marcado ese día 26 porque ambiciona poder dinamitar la investidura de Feijóo con su acuerdo con el expresidente fugado de la Generalitat Carles Puigdemont. Todo lleva a pensar que Feijóo no saldrá investido en ninguna de las votaciones: tiene 172 votos a favor (PP, Vox, UPN y CC), por lo que le faltan cuatro para poder sacar adelante la primera votación. Puigdemont mantuvo ayer una videoconferencia con su entorno, en la que les trasladó que para él era muy importante lo que sucediera el día 19 en la votación en el Consejo de la UE sobre el uso del catalán. Pero, no obstante, también dio por cerrado el acuerdo sobre la amnistía y para implementar el referéndum, aunque esto no signifique casarse con Sánchez y que mantendrá el chantaje en cada votación y en el día a día. Además, dijo que le gustaría que el PP entrara en el acuerdo para no tener luego problemas en el Tribunal Supremo, y les adelantó que la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Yolanda Díaz, le había dicho en su visita a Bruselas que iba en nombre de Sánchez. Aunque Moncloa y el PSOE lo negaran".
Al parecer, el propósito de Sánchez es reventar la sesión de Feijóo con el anuncio de un acuerdo con Junts. Mientras tanto, el líder popular se dedica al noble arte de dar palos de ciego y acaba de rescatar el famoso concepto del "encaje", algo en desuso ya. "Feijóo reconoce la necesidad de un encaje de Catalunya en España pero pactado con el PP", titula La Vanguardia al hilo de las últimas declaraciones del expresidente de Galicia. El texto es de Carmen del Riego: "Alberto Núñez Feijóo se siente interpelado por Puigdemont. Como candidato a la presidencia del Gobierno, el líder del PP escuchó "las condiciones" que pone para negociar la investidura, cree que con Pedro Sánchez o con él, que es el candidato designado, y por eso su respuesta a las condiciones es "no", y lo dice con el conocimiento de cuál es la consecuencia, por eso dice que seguirá diciendo no "me cueste lo que me cueste o me cueste ser presidente". No va a aceptar "el chantaje" con unas condiciones que considera "inaceptables", y por eso le vuelve a tender la mano al PSOE, con quien espera volver a reunirse, aunque sea tras la primera votación de su investidura, y hace un reconocimiento y una advertencia: "Se que hay que buscar un encaje para Catalunya en España, pero ese encaje será fruto del pacto, o no será, será fruto del acuerdo, o no será, será conforme a la ley o no será, y tendrá encaje constitucional o no será"".
Y: "Alberto Núñez Feijóo, que compareció ante los medios de comunicación tras entrevistarse con el presidente canario, Fernando Clavijo, llamó al PSOE a "recapacitar" y aceptar negociar los seis pactos de estado que le ofreció, "para que España no caiga en una anomalía democrática". Sería, a su juicio, lo mejor para España, porque reuniría en el Congreso una mayoría que podría alcanzar los 280 diputados, ya que Vox ha comprometido su voto aunque el PSOE apoye la investidura de Feijóo. Una cifra que permitiría alcanzar "acuerdos históricos para sacar adelante el país"".
En el PP catalán miran con escepticismo esta nueva teoría de Feijóo, que ya tuvo que rectificar sobre su pretensión de reunirse con Junts.
Más noticias. "La amnistía de Puigdemont desata un incendio en la Policía: 'Ellos, impunes; nosotros, con secuelas de por vida'". El malestar en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado es notorio con el asunto de la amnistía, como refleja el anterior titular de Vozpópuli sobre una información que firma Gonzalo Araluce: "La amnistía que negocian Pedro Sánchez y Carles Puigdemont ha alcanzado de pleno la línea de flotación del Piolín, como se bautizó al barco en el que habitaron los agentes de la Policía Nacional en la operación Ícaro, con el objeto de salvaguardar la seguridad pública durante los disturbios de Cataluña en el referéndum ilegal de 2017. El PSOE ya considera "barata" esta exigencia del expresidente catalán, pero los uniformados de azul consideran que es una "agresión" frontal a los "principios que defendimos" durante las algaradas. "¿De qué sirve la Justicia?", es la pregunta que se repiten los agentes. "Nos jugamos la vida y algunos compañeros quedaron con secuelas de por vida --aseveran--; pero ahora se ensalza como figura de Estado a quienes reventaron el orden, que van a quedar impunes. No entendemos nada"".
Y: "En la Policía Nacional no sólo están grabadas a fuego las imágenes de los disturbios durante el referéndum o los que se vivieron durante la sentencia del procés: la fotografía de la plaza de Urquinaona, con un puñado de agentes defendiéndose con sus escudos de una lluvia de cascotes, ya es Historia del cuerpo. Junto a esas escenas, los policías destacan del mismo modo el balance de heridos: 431 agentes --de las diferentes fuerzas de seguridad-- durante el plebiscito auspiciado por Carles Puigdemont; otros 288 tras conocerse el veredicto del Tribunal Supremo en 2019. "Son números muy elevados, pero que tienen muchas historias detrás", apuntan voces internas de la Policía Nacional. Desde el agente que se vio obligado a jubilarse por las lesiones que le impedían el adecuado desempeño de su actividad, hasta las campañas de hostigamiento contra los agentes y familias que viven de forma permanente en Cataluña: "Nos convertimos en el objetivo número uno del independentismo y se cebaron con nosotros"".
Por otra parte, la futbolista Jenni Hermoso ya ha presentado denuncia contra el apartado presidente de la Federación de Fútbol, Luis Rubiales, por el beso del Mundial.
En materia económica, hay gran inquietud por la adquisición de acciones de Telefónica a cargo de un fondo de Arabia Saudí, país que no solo compra futbolista y la Supercopa de la Recopa de España por gentileza del antedicho Rubiales y el mago pop del balompié Geri Piqué.
7 de septiembre, santoral: Regina de Alesia, Alpino de Chalons, Carísima de Albi, Clodoaldo, Esteban de Chatillon, Evorcio, Gauzlino de Toul, Grato de Aosta, Hilduardo de Flandes, Juan de Lodi, Memorio de Breuil y compañeros y Sozonte de Cilicia.