El KGB de Alay y lamentos 'indepes' por El Prat
La mano derecha de Puigdemont, junto a Boye y Canadell, quería montar un servicio secreto catalán. Aragonès brama por la cancelación de los planes para el aeropuerto.
10 septiembre, 2021 08:14El independentismo está en horas bajas a pesar de que Elisenda Paluzie ha tenido un calambre y pronostica una asistencia a la manifestación de la Diada de seis cifras, ahí es nada. Hace un par de días declaraba en la emisora oficial de la Generalitat que el objetivo de la Assemblea nunca ha sido batir récords de participación. Ahora, sin embargo, se atreve a hacer augurios sobre desfiles masivos, como en los viejos tiempos del procés.
Sea como fuere, todo son malas noticias y pulgas. No hay ni un pam de net en la actualidad independentista, que colapsa en Europa con la trama rusa de Puigdemont y se hunde en las arenas movedizas de La Ricarda, el estanque privado que se interpone en los planes de convertir El Prat en un aeródromo intercontinental.
La novedad en el plano moscovita del "moviment" es una exclusiva de Crónica Global sobre las andanzas de ese titán de la estrategia internacional que es Josep Lluís Alay, experto tibetano al que hay que atribuir el último "si hay que ir se va, pero ir para nada es tontería" del republicanismo catalán. "Alay: “Si apostamos en público por el Kremlin, hagámoslo de verdad”" es el titular de la información que signa María Jesús Cañizares. El sumario ahonda en la peripecia: "El hombre de confianza de Puigdemont y Boye involucraron a un "flojo" Canadell en los contactos rusos, temían que el expresidente “molestara” a Putin y apostaban por una "inteligencia catalana"".
Claro, Alay, Puigdemont, Boye y Canadell... ¿Qué puede salir mal? Un cuarteto de lujo. Tiembla Madrid. Se conoce que Boye, el letrado de las palomitas, iba a estar al frente de la seguridad. Y Alay sería el jefe de los servicios secretos. A Canadell le tocaba financiar el cotarro y Puigdemont prestaría su pose, su apresto de "presidente legítimo" en el "exilio". Así lo cuenta Cañizares: "Los mensajes cruzados entre los miembros del núcleo duro de Carles Puigdemont desvelan hasta qué punto estaban convencidos de que Rusia apoyaría la independencia de Cataluña. “Si apostamos en público por el Kremlin, hagámoslo de verdad”, escribe Josep Lluis Alay el 23 de agosto de 2020. Su interlocutor, Gonzalo Boye, se muestra entusiasmado con la idea. Pero también temeroso de que el entorno del fugado “moleste” a Putin con referencias al caso Navalny o a Bielorrusia. Incluso lamentan los resbalones del propio expresident y de un "flojo" Joan Canadell, cuyos contactos con un empresario bien relacionado con el servicio secreto ruso, insuflaron esperanza a los defensores de esa trama. Boye y Alay también abordaron la necesidad de crear una “inteligencia catalana”, una antigua aspiración del independentismo".
Sigue la pieza: "Estos y otros temas aparecen en los mensajes interceptados por la Guardia Civil, a los que ha tenido acceso Crónica Global, y que han situado a Alay, jefe de la Oficina de Puigdemont, en el centro de un operativo consistente en recabar apoyos rusos, una vez constatado el rechazo de las instituciones europeas al procés unilateral del fugado. Los comentarios demuestran que la trama rusa del expresidente catalán era algo más que "historias de fantasmas", como dijo Alay en TV3. Así, el 23 de agosto de 2020, Alay explica a Boye, abogado de Puigdemont y de Quim Torra, que hay “un triángulo ahora clave. Belarus (Bielorrusia)-Snowden-Navalny. Y no podemos equivocarnos en ninguno de esos vértices”. El historiador, que acompañaba a Puigdemont cuando éste fue detenido en 2018 en Alemania, teme que éste moleste a Putin. “En cualquier momento puede aparecer un tuit del president a favor de Navalny. Y eso nos mata”. Se refiere al opositor ruso Alexei Navalny".
Se tenía la impresión (y una cierta esperanza) de que ERC no era como Junts per Catalunya (JxCat), pero hay algo en el partido republicano que acaba por empujarle por los derroteros de la destrucción de aquello que toca. Es un fatalismo irremediable, una pulsión negativa similar a la del escorpión en la fábula con la rana y el río.
El colapso del plan para ampliar el aeropuerto de El Prat es la demostración de esa tendencia natural de ERC hacia el desastre. Todo parecía ir sobre ruedas. Una inversión millonaria, decenas de miles de puestos de trabajo, un aeropuerto mundial y ese estanque privado, nido de patos, garzas y gaviotas donde crece la salicornia. Ayer lo visitaba la alcaldesa Colau con la vicepresidenta Yolanda Díaz. Qué contentas que lucían, como si ellas solas hubieran salvado el planeta, concentrado en esas 20 hectáreas sólo al alcance de la vista de los privilegiados.
Dice El Periódico que "El Govern no puso nunca objeciones formales a la ocupación de La Ricarda". Que le daba lo mismo o lo mismo le daba. Escribe Eduardo López Alonso: "El gran escollo para la ampliación del Aeropuerto de Barcelona, el espacio protegido de La Ricarda, nunca fue para el Govern un obstáculo insalvable para la ampliación. Las reuniones del Comité de Coordinación Aeroportuaria de Catalunya, como en la que se presentó el viernes pasado el Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA II) de Aena hasta 2026, no reflejaron quejas oficiales por parte del representante del Govern, como aseguran diversas fuentes de Aena y otros presentes en la reunión. "Los representantes del Govern parecían encantados", aseguran fuentes presentes en la reunión. Esa actitud soliviantó especialmente a los municipios que se oponen a la ampliación".
Y: "En ese documento se incluía el plan general, con la afectación prevista de espacios naturales para alargar la tercera pista, y también los ingresos y gastos previstos para afrontar la inversión de 1.700 millones planteada para la ampliación del Aeropuerto de Barcelona. En fuentes del Govern se escudaron ante esa crítica de complacencia al considerar que la reunión del pasado viernes era meramente informativa y no era el momento de presentar alegaciones".
Ah, muy bien, una reunión con canapés para pasar el rato. En el plano político, El País sostiene la singular teoría de que "El parón de El Prat complica el plan de Sánchez para Cataluña". Sólo el diario de Prisa lo ve así. Firman la nota C. E. Cué y C. S. Baquero: "La ampliación del aeropuerto de El Prat --1.700 millones en inversiones-- era la joya de la corona de la “agenda del reencuentro”, el plan de Pedro Sánchez para desactivar el procés independentista. El pasado viernes, se reunió a los afectados —Generalitat y ayuntamientos— para presentarles el plan definitivo, llamado DORA, que incluye la ampliación “hacia el Este” y compensaciones por los daños a una zona protegida. El representante de la Generalitat, Isidre Gavín, señaló: “No queremos estar en una posición de bloqueo”, según fuentes presentes en la reunión. Los municipios de Barcelona y El Prat, de los comunes, muestran su rechazo. Esa tarde, el president Pere Aragonés escribe en Twitter que el plan publicado “no refleja el consenso establecido en el sí del Govern” (en realidad Aragonès tuiteó que "no refleja el consenso establecido en el seno del Gobierno" no en el "sí") y exige una rectificación. Pese a este foco de tensión, Sánchez y Aragonés mantienen sus planes para poner en marcha la mesa de diálogo sobre Cataluña en los próximos días".
El resto de medios, a diferencia de El País, atisban una maniobra de Sánchez para centrar al Govern y que se le quite la tontería. Y ven más perjuicios para las formaciones independentistas que para el presidente del Gobierno. Así y en El Confidencial, Marcos Lamelas escribe que "el presidente se siente fuerte y habrá paz, ya que Pere Aragonès mantiene la mesa de diálogo, pero las inversiones ya no están aseguradas. Pero no solo eso: el Gobierno catalán, que parecía unido, ya no lo está tanto. Y otro cambio notable es que la CUP se queda sin excusas para vetar los Presupuestos de la Generalitat que prepara el conseller de Economía, Jaume Giró. De repente, todo ha cambiado. El primer giro es que el grueso del independentismo esperaba la represalia más inmediata: la suspensión de la mesa de diálogo. Pero Aragonès la mantiene. En esencia. La Generalitat acudirá débil. Solo tienen la mesa. Nada más. Y la semana que viene será el Gobierno central el que, con Pedro Sánchez presente o sin él, tendrá toda la fuerza. (...) Tampoco se enfocan igual las relaciones con Madrid. ERC sigue esperando negociar los Presupuestos Generales del Estado como una vía para dirigir inversiones hacia Cataluña. En cambio, Jordi Sànchez dio una rueda de prensa pidiendo que se deje de dar estabilidad al Ejecutivo de Sánchez. “Basta de lamentarnos de estas actitudes".
Sànchez, el hábil. Como que no se ve el interés de JxCat en que todo salte por los aires y vayamos a unas elecciones en Cataluña donde los neoconvergentes puedan recortar la parca distancia que les sacó ERC.
Aragonès, por su parte, está muy enfadado. El "nen barbut", como le llaman propios y extraños", está que se sube por las paredes. Se conoce que pensaba que podía estar en misa y repicando y ha visto que no. De la información de Marta Lasalas en El Nacional: "Indignación, perplejidad, maniobra de presión, boicot... El president, Pere Aragonès, ha comparecido visiblemente enojado y no ha ahorrado los reproches hacia la decisión del Gobierno de suspender el proyecto de ampliación de El Prat. Ha atribuido el gesto a un intento de imposición del Estado y a las diferencias internas dentro del ejecutivo de Pedro Sánchez, y ha asegurado que esta crisis no hará descarrilar la mesa de diálogo que se tiene que celebrar la próxima semana. "Hay mucha gente que quiere que la mesa de negociación fracase, por mí no será", ha advertido. (...) Aragonès, que incluso ha admitido que normalmente no se expresa de esta manera, ha atribuido la decisión a "malas excusas para intentar colgar las culpas" al Govern catalán, cuando en realidad, según ha asegurado, las diferencias sobre este tema están dentro del Gobierno. Desde la Generalitat se subraya que el anuncio de marcha atrás se ha hecho el día antes de que la vicepresidenta Yolanda Díaz, que ayer celebraba la suspensión, acompañara a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a la Ricarda para protestar por el intento de ampliación".
Más noticias. Que Marlaska no dimite, se sorprenden La Razón y El Mundo. Aún colea la denuncia falsa sobre la última agresión homófoba. "Marlaska se escuda en los policías del caso Malasaña para justificar su batacazo", afirma El Mundo. La pieza es de Gema Peñalosa y dice así: "Fernando Grande-Marlaska enfrentó ayer la resaca de la falsa agresión homófoba del barrio de Malasaña que ha removido su Ministerio con la idea clara de no dejar su cartera. Por segundo día consecutivo, descartó presentar su dimisión por asumir y capitanear la versión del joven denunciante cuando la investigación estaba todavía en una fase embrionaria y sin la suficiente solidez. La supuesta víctima admitió el miércoles que se había inventado que unos encapuchados le tatuaron el glúteo con la palabra "maricón" y que, en realidad, las lesiones fueron consentidas. El cambio de versión supuso un tremendo varapalo para Marlaska por su encendida defensa de la denuncia de la presunta víctima".
Continúa el texto: "Con el vuelco de las pesquisas, el ministro del Interior se escudó en la Policía para amortiguar su batacazo y se presentó como un mero transmisor de la información que le llegaba del equipo de investigadores. Marlaska, que el miércoles por la mañana había señalado a Vox acusándole de "jugar al límite" en el respeto a la diversidad, vinculándolo con el «caldo de cultivo» que hace «intensificar» los delitos de odio, afirmó después que se enteró «por la tarde» de la falsedad del testimonio del joven. Tras rebajar su postura inicial --que incluso llevó a Pedro Sánchez a la convocatoria urgente para hoy de la comisión contra los delitos de odio--, el titular del Ministerio del Interior quiso dejar clara su intención de continuar encabezando y coordinando la lucha contra, apuntó, la «lacra» de los discursos de odio".
Algunos medios destacan el 20 aniversario de los atentados contra las Torres Gemelas de Nueva York y el Pentágono. En el Abc entrevistan a Aznar, que sostiene que más que atentados fueron actos de guerra.
10 de septiembre, santoral: Nicolás de Tolentino, Agabio de Novara, Autberto de Avranches, Eduardo Barlow, Nemesio de Alejandría, Pulqueria de Constantinopla, Salvio de Albi y Teodardo de Spira.