Primeras planas

Rajoy lo sabía ('caso Kitchen') y Lluís Llach, exfascista

Tormenta de heces sobre el PP a cuenta de los seguimientos a Bárcenas en tiempos de Mariano. El Gobierno se plantea congelar los sueldos de los funcionarios. Llach, el cruzado de Cristo Rey

10 septiembre, 2020 09:08

Se precipita sobre el PP una pedregada de fragmentos fecales procedentes de los tiempos de don Mariano, aquel hombre de los puros que acabó fagocitado por el bolso de Soraya mientras su propio espectro se atizaba unos whiskies en el reservado de un restaurante madrileño. Así asistió Rajoy a su propio funeral político, de cuerpo ausente. Pero el Barbas, también conocido como el Asturiano (habrá que preguntar al comisario ladilla Villarejo a santo de qué eso del asturiano para referirse a un natural de Santiago de Compostela) no fue desactivado tras la moción. Para nada. Todavía es radiactivo, y mucho para su propio partido.

Tercer día de portadas que crujen a los genoveses gracias al prócer gallego, el sujeto de la gran cachaza, tremendo lector de diarios deportivos y egregio miembro de la cofradía de los chupapercebes, quien --rodeado por portentos como Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal, entre otros-- condujo al partido conservador a las más altas cotas de la nimiedad inane. Lo extraordinario es que el PP todavía exista, pero no es descartable que tenga que cambiar de siglas y de sede para alejarse del efluvio tóxico del marianismo.

La entrega informativa del día es que Mariano estaba al corriente del espionaje con medios del Estado al tesorero pepero Bárcenas. O sea que el individuo que parecía estar siempre en Babia, sólo al cabo de los resultados de la Liga y el Tour, conocía perfectamente lo que se cocía en torno al susodicho Bárcenas porque todo venía de órdenes suyas, según el sumario del caso. En El Español se ocupan del expediente Brais Cedeira y María Peral: "Un informe de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional apunta que el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, estaba al tanto de las labores de espionaje presuntamente orquestada desde las altas instancias del Ministerio del Interior para obtener documentos comprometedores que estaban en poder del extesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, y su esposa, Rosalía Iglesias. Según este documento, al que ha tenido acceso El Español, los investigadores de la operación Kitchen afirman que esta actuación policial coordinada por el entonces secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, contaría "con conocimiento del Asturiano", el apodo que el excomisario Villarejo y su camarilla en la cúpula policial empleaban para referirse al expresidente del Gobierno y del PP".

En la información consta también una conversación de Villarejo con otro comisario, Enrique García Castaño, alias el Gordo, que da prueba del nivel del que llegó a ser el policía de cabecera de políticos, jueces y empresarios. Habla Villarejo: "A mí me dan caña y tal y cual. Pero la gente me dice: pero este tío, hijo de puta, que está loco, que no se qué, o sea, yo tengo, yo tengo todas mis cosas, yo tengo un notario digo, si me pasa algo, me muero de una forma extraña y tal, que no me fío de estos mierdas. Bahhh, en general estos no tienen cojones, son unos mierdas, pero bueno, digo si me pasa algo, inmediatamente POM! Y tengo mucha chicha. Mucha chicha. Porque yo he hablado con enlaces, con el Barbas...".

Noticias de portada de 'El Español' del 10 de septiembre / EE

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En El Confidencial cuentan la captación por parte de Interior del chófer de Bárcenas como agente doble, que se le pagaron 53.000 euros a razón de 2.000 al mes (una miseria dado el riesgo y la importancia que tenía para algunos obtener información del Bárcenas) y que se llegaron a movilizar hasta 70 agentes para el caso. La nota viene con las firmas de Beatriz Parera, Pablo Gabilondo y José María Olmo: "El espionaje del Ministerio del Interior en la última etapa del PP al extesorero del partido Luis Bárcenas no reparó en medios, personal y gastos. El objetivo pasaba por localizar, al margen de la Justicia, la documentación en poder del antiguo gestor de los fondos del partido y salvar a la formación. El operativo irregular, considerado una trama parapolicial desplegada bajo la dirección de altos cargos del Estado, empleó a más de 70 agentes, realizó más de medio centenar de seguimientos y utilizó tecnología punta para rastrear móviles. Todo, al servicio del partido que en aquellos años dirigía el Gobierno de la nación".

Sigue la pieza un párrafo después: "En el centro de la trama, un agente doble para acercarse al corazón de los Bárcenas: el chófer de la familia, Sergio Ríos, que fue reclutado e informó de todos los movimientos, sustrayendo datos privados y documentos a cambio de 2.000 euros mensuales y la promesa de que le introducirían en la Policía, como finalmente sucedió. 'Me pareces un tío que aprende con una rapidez que te cagas...', le alaba Villarejo en una de las reuniones que mantuvo con él. 'Tú habrás visto que yo achucho poco y que... Pon 2.000, no 200, ¡mamón!', le incidía sobre el dinero que debía cobrar, que terminó por superar los 53.000 euros a cargo de los fondos reservados del Estado".

En El Mundo indagan en los efectos de la causa en el seno del partido y destacan que hay exministros quejosos porque Casado se unta en aceite. "La 'ruptura total' de Génova con Rajoy genera malestar interno y solivianta a exministros. Sorayistas y afines a Cospedal creen que el caso sí concierne a Casado: 'Es el sucesor y asumió una mochila'". Es el subtítulo de la pieza que firma Juanma Lamet, quien apunta en su crónica que "Casado, en una entrevista concedida a El Mundo, soltó cualquier amarra con Rajoy: 'En esos años yo era diputado por Ávila y no tenía responsabilidades en el partido', dijo, antes de subrayar que él mantiene su compromiso de actuar con 'honorabilidad' y 'ejemplaridad'. Preguntado específicamente por Rajoy, no quiso 'entrar a valorar acusaciones que se hacen por una parte interesada'".

Continúa el texto: "Pero los afectados por las revelaciones de la Fiscalía Anticorrupción lamentan que Casado no salió en defensa del expresidente y no remarcó específicamente su confianza en él, sino que sólo habló de la 'presunción de inocencia', en términos generales. Fuentes de Génova contestan que el compromiso de Casado con la regeneración va más allá, incluso, de su propio partido. Pero en la entrevista sí que dijo: 'Ni siquiera hay una imputación. Por favor, seamos prudentes'".

Tal vez para compensar el peso de las deyecciones sobre el PP, en Ok Diario solazan a sus lectores con los pagos venezolanos a los fundadores de Podemos cuando aún no habían fundado Podemos. Escribe Carlos Cuesta: "La Fundación CEPS en la que Pablo Iglesias estuvo en el Consejo Ejecutivo recibió dinero de la dictadura chavista venezolana de forma habitual. Una de las personas clave en los pagos a la fundación de Podemos fue Delcy Rodríguez, que dio dinero a CEPS desde los diferentes departamentos por los que fue pasando. La cifra global de dinero que la fundación podemita y sus ocho compinches recibieron a título personal de las distintas áreas que comandaba la protagonista del Delcygate se eleva a 1.856.849,53 euros".

Noticia de portada de 'Ok Diario' del 10 de septiembre / OD

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Sigue Cuesta un párrafo más tarde: "Los pagos realizados por los departamentos liderados por Delcy Rodríguez abarcan desde febrero de 2006 hasta octubre de 2014. Hay que recordar que Podemos nació ese mismo año 2014, en el mes de marzo. Mantener esos cobros con el partido creado era un riesgo evidente a efectos de la normativa española de financiación ilegal y con dinero procedente del extranjero. Justo en ese momento, se paralizó el cobro a través de CEPS y se incrementó la relación con otra entidad, CELAG, en la que figuran Juan Carlos Monedero, Alfredo Serrano y el propio Rafael Correa –expresidente de Ecuador– como miembros de los Consejos determinantes de la entidad. En Celag, además, jugó un papel clave como impulsor, Íñigo Errejón".

Tambores electorales en la Comunidad de Madrid, según apunta Carmen Morodo en La Razón. "Ayuso plantea adelantar las urnas e ir al mismo tiempo que Cataluña" es el titular de la pieza que incluye consideraciones del siguiente calibre: "En el entorno de Ayuso quieren elecciones, y hasta analizan la conveniencia de convocarlas con los comicios catalanes o a rebufo del clima preelectoral en Cataluña, dentro de las especulaciones que abre la sentencia firme de inhabilitación contra el presidente de la Generalitat, Quim Torra, que se espera para el mes de octubre. El paralelismo con el ruido electoral catalán ayudaría, entienden en el entorno de Ayuso, a utilizar el discurso nacional territorial, 'que siempre funciona muy bien en el electorado madrileño'".

En El País apuntan que el Gobierno se plantea congelar el sueldo de los funcionarios ante la evolución del IPC, que cerró julio en el -0,5%. Y en La Vanguardia destacan el acuerdo en el Parlament para topar el precio de los alquileres, asunto que será pasto de las deliberaciones del Tribunal Constitucional.

De los digitales catalanes destacan dos noticias, los antecedentes fascistas de Lluís Llach y que la Guardia Civil ha identificado a uno de los promotores ejecutivos del Tsunami. La primera informacilón viene en el e-notícies: "El diputat de Ciutadans Nacho Martín Blanco, ha recordat aquest dimecres a l'exdiputat de JxSí Lluís Llach que va ser 'membre dels Cruzados de Cristo Rey' a través d'una piulada. El tuit del diputat es produeix després que Llach l'acusés en una piulada de fer 'mèrits familiars' per haver demanat a Roger Torrent que es retractés per haver convidat l'expresidenta del Parlament Carme Forcadell a la Cambra. 'Mèrits familiars, Lluís? Què vols dir? Tinc clar que no ets responsable de ser nét d'alcalde franquista i fill de falangista, però no crec que tu, que de jove vas ser membre dels Cruzados de Cristo Rey i ara el més ultra dels separatistes, estiguis en disposició de donar lliçons' ha escrit en resposta a l'acusació de Llach".

En cuanto a las novedades del Tsunami, es Quico Sallés en El Món quien trae la última hora: "Un nom. Aquesta és la principal pista que la Guàrdia Civil té per posar cares al Tsunami Democràtic. Es tracta de F.F., un ciutadà basc resident a la Catalunya Nord, que els investigadors del tall de la Jonquera identifiquen com la persona que va contractar l’escenari del 10 i 11 de novembre de l'any passat. Una identificació que s’afegeix a les perquisicions sorgides de la troballa d’un router i una targeta SIM en el punt central de la protesta contra la sentència del Procés. La Guàrdia Civil ha demanat al jujat de primera instància i instrucció número 4 de Figueres, que investiga el cas, que sol·liciti, mitjançant una comissió rogatòria, la col·laboració de la justícia francesa per prendre-li declaració com a investigat. Els investigadors destaquen el 'rol' del sospitós 'en l’organització de la protesta' i el seu 'coneixement de les entitats de la resta dels responsables de la plataforma independentista Tsunami Democràtic'".

Por otra parte, Elisenda Paluzie dice que el Gobierno del PSOE y Podemos le ha intervenido el teléfono móvil. Suena al espía en patinete que seguía a Eduard Pujol.

10 de septiembre, santoral: Agabio de Novara, Autberto de Avranches, Eduardo Barlow, Nemesio de Alejandría, Nicolás de Tolentino, Pulqueria de Constantinopla, Salvio de Albi y Teodardo de Spira.