El caos y Puigdemont por tres

Tormenta de encuestas. ERC y Ciudadanos se disputan la condición de candidatura más votada y se avizora un imponente carajal. La encuesta de El Periódico otorga una pírrica victoria a ERC y el frente independentista. La de El País registra un sólido pero insuficiente avance del bloque constitucional. En El Mundo, la victoria de Arrimadas sería una derrota moral del independentismo, escribe Víctor Mondelo al hilo del sondeo del diario. La Razón también lleva encuesta, victoria en votos, derrota en escaños de los constitucionalistas.

Mariano Rajoy recibió muchos elogios por convocar elecciones. El inesperado jaque al soberanismo del presidente del Gobierno suscitó importantes glosas sobre la maestría táctica del estadista de Pontevedra. En el plano de los intereses de partido, su formación está en puertas de sufrir un severo correctivo en favor de Ciudadanos. En el general no es previsible que las elecciones despejen ningún horizonte. Servirán, eso sí, para hacer cábalas y traslaciones de los resultados a un hipotético referéndum con la distorsión de que no se puede sostener a ciencia cierta que los comunes sean independentistas ni lo contrario.

Sobre la pugna entre las listas soberanistas, en El Periódico deshinchan las expectativas de Puigdemont. Escribe José Rico: "En una semana, Esquerra ha pasado de moverse en una horquilla de 30-31 escaños a hacerlo en los 34-35 diputados, gracias a haber arañado 1,7 puntos. Si en la anterior encuesta del GESOP el tándem Junqueras-Marta Rovira sentía en el cogote el aliento desde Bélgica del 'expresident' y candidato de Junts per Catalunya, ahora el 'efecto Puigdemont' parece haberse diluido a gran velocidad: 1,4 puntos menos y de 29-30 parlamentarios a 26-27".

En cuanto a los partidos contrarios, el texto apunta: "Hace una semana, Arrimadas e Iceta estaban empatados a todo en tercera posición. Ahora, Ciutadans se ha colado entre Junqueras y Puigdemont y pugna con la lista del 'expresident' por la segunda plaza, mientras que los socialistas se han descolgado. El partido de Albert Rivera se ha adjudicado 2,2 puntos en una semana y conseguiría 27-28 parlamentarios, dos más que en el sondeo precedente. En voto estimado, la ventaja de Arrimadas sobre Puigdemont es más amplia (3,3 puntos) y los naranjas se quedan a tan solo un punto de ERC, aunque siete diputados por debajo".

Del comportamiento político anterior al 155 de los partidos independentistas cabe suponer que no tendrán inconveniente en darle de nuevo al play del proceso si logran 68 escaños. Frente a esta opción, Argelia Queralt firma un bienintencionado análisis en El Periódico sobre lo que debería ocurrir en un mundo ideal: "¿Qué necesita Catalunya en estos momentos? La respuesta está clara: un Govern que la dote de cierta estabilidad, que nos restituya en el marco constitucional, no para conformarnos sino para serenarnos. Un Govern que gobierne, si me permiten la redundancia. Un Govern que deje a un lado la independencia como objetivo exclusivo y que, en cambio, repiense la estrategia para que los y las catalanas podamos volver a sentirnos cómodos entre nosotros. Investir a un president huido o encarcelado (aunque sea preventivamente) no parece la mejor forma de encauzar la nueva etapa que necesariamente debe abrirse en Catalunya. Y que nadie se confunda: esto no significa renunciar al independentismo, ni al federalismo, ni aceptar el statu quo. Más bien todo lo contrario: debemos reconducir una situación enrarecida en extremo para poder plantear legítimamente las reivindicaciones de cada cual, también las territoriales, eso sí, siguiendo todos las mismas reglas de juego".

Portada de 'Ara' del 15 de diciembre de 2017

"-La seva campanya es basa en la restitució del president Puigdemont, però ¿i si no pot prendre possessió?

-Diem una frase que ens creiem. Cada vot pel president Puigdemont l’acosta un quilòmetre aquí. És el revés més important que pot tenir el senyor Rajoy. Jo vull que a Palau hi hagi el president Puigdemont i el vicepresident. Qualsevol que no sigui Puigdemont és acceptar que Rajoy pugui canviar els presidents. Per això ens hem de concentrar perquè hi hagi el mateix Govern. Com tornarà o com ho farà no hi entraré. Però algú haurà d’explicar per què si un president és escollit democràticament no se’l deixa exercir.

-ERC està a favor de restituir Puigdemont però han posat el nom de Marta Rovira sobre la taula. En el seu cas no sabem quin és el pla B.

-Si entrem en aquesta lògica, la nostra llista perd tot el sentit. Començar a pensar en alternatives d’aquestes és començar a assumir la derrota. El vot al president Puigdemont val per tres. Per consolidar la independència, per restituir el Govern i és la bufetada més gran que pot rebre Rajoy. A escala internacional és Rajoy o Puigdemont".

Magnífico ejemplo de pensamiento mágico sobre el poder de los votos y su influencia en las decisiones judiciales. Los gestores de la república en la nevera no salen del bucle. "El vot al president val per tres" es una frase que anticipa milagros parecidos a los de los bancos no se irán y Europa entera se postrará a los pies de la nación catatónica.

Pilar Rahola escribe un duro artículo contra Iceta en La Vanguardia, muy en la línea de los mensajes que emite Puigdemont. La operación consiste es culpar al dirigente socialista del encarcelamiento de los Jordis y los exconsejeros: "Esta Navidad habrá cuatro buenas personas, demócratas de pura cepa, gente de ideales nobles, que no lo pasarán con su familia. Y otros lo deberán pasar lejos de casa. ¿Ni una sola palabra de empatía, ni un gesto de apoyo, ni una mínima incomodidad, nada siente el PSC ni el señor Iceta por la barbaridad de tener compañeros del Parlament en la prisión? Al contrario, baila, ríe, explica su inmensa felicidad al mundo y se mofa de los adversarios. No sé a ustedes, pero a mí no me ha fallado el político. Me ha fallado la persona".

Rahola evita comentar que Iceta ha pedido el indulto preventivo para todos, cosa rara tratándose la columnista de referencia de La Vanguardia de un ejemplo de moderación y equilibrio.

15 de diciembre, santoral: Cristiana, María Crucificada de Rosa, Maximino, Valeriano y Urbicio.