Puigdemont, “dispuesto a ir a la cárcel” por la convocatoria del referéndum

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont, mantiene el pulso para “desconectar” a Cataluña del resto de España en un breve espacio temporal. Incluso está “dispuesto a ir a la cárcel por haber convocado un referéndum” para septiembre de 2017. Asume, además, que una participación del 20% en la consulta sería sinónimo de derrota, “aunque salga un 100% a favor de la independencia”.

Tal vez por ello cree tener un as en la manga para frenar el procés en seco: pedirá una reunión con el nuevo Gobierno de España y está dispuesto a “pactar todo”, según desvela en la entrevista que Vanity Fair le hizo un día después de impulsar el referéndum y que publica este jueves. Desde la pregunta de la consulta soberanista hasta la fecha y el mínimo de participación para darle validez. Más aún: “España podría hacer una oferta a los catalanes, ir a una maximum devolution --más competencias--” para que se queden en España.

Democracia

Puigdemont apenas tuvo 20 minutos para decidir si aceptaba el cargo de 130º presidente de la Generalitat ofrecido por Artur Mas tras la renuncia de éste por presión de la CUP para facilitar la formación de Gobierno. Declinar la propuesta “hubiera sido una cobardía” y eso, dice, no va con él. Desde entonces, trabaja para la desconexión. Y tiene prisa por proclamarla, porque no tiene intención alguna de presentarse a la reelección.

Ir a la cárcel por la convocatoria del referénum sería una barbaridad democrática inexplicable

La cárcel no asusta al hombre que a punto estuvo de perder la vida en un accidente de tráfico en 1983. Pero expresa que el ingreso en prisión por el referéndum “sería una barbaridad democrática inexplicable”. Inexplicable porque defiende que la decisión salió del Parlamento catalán y, “en democracia, las leyes […] las hacen los parlamentos […] y los ciudadanos siempre están por encima”.

Cinco apellidos catalanes

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en 'Vanity Fair'

Sobre Mas, niega que haya intentado tutelarle, a pesar de que el expresidente catalán le visita semanalmente para monitorizar su gestión, como publicó Crónica Global. Es por ello que siente que se le ha subestimado. “Pero no me molesta: yo siempre saco ventaja de esto”, anuncia. Además, se siente “más cómodo con la CUP” como socio de gobierno que cuando su partido (CDC) “pactaba con el PP, el partido de la corrupción”.

Los Pujol y el 3%

Hablando de este delito. A Puigdemont, ni los escándalos de los Pujol ni los cobros del 3% ni el caso Palau le parecen corrupción en su partido. Sobre los primeros, argumenta que son líos de familia ajenos a Convergència y a la política, aunque espera que “si han hecho alguna cosa mal la paguen sin ninguna excepción”: “No les tengo que defender, pero tampoco condenarles por algo que no tiene que ver con mi partido ni con Cataluña”.

Es más productivo para todos una coalición entre el PP y el PSOE

En relación al escándalo del 3%, separa al tesorero de CDC involucrado, Andreu Viloca, de su homólogo en el PP Luis Bárcenas: “Ni ha borrado ordenadores, ni ha pagado nada a nadie ni hemos tenido un sistema de distribución y blanqueo […] ninguno de nosotros se ha lucrado […] si alguien ha cobrado comisiones ilegales en CDC, que rinda cuentas por ello”, concluye.

Coalición PP-PSOE

Un último apunte del presidente catalán se refiere a la política española. Lamenta la situación de “casi” desaparición del PSOE y estima que “un Gobierno o es fuerte o no merece la pena”. Por ello, “es más productivo para todos una coalición PP-PSOE”.

Palabra del hombre que viajaba a Madrid en vuelos internacionales, algo más caros que el puente aéreo, para mostrar el pasaporte en lugar del DNI.