Imagen de archivo de una acción de Arran

Imagen de archivo de una acción de Arran Europa Press

Política

Arran organiza ahora un taller contra "el facha" en el que enseña a romper cordones policiales en Sant Cugat

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Dos meses después de la polémica por los talleres de lanzamiento de cócteles molotov contra la policía en Granollers, Arran protagoniza una acción de las mismas características en Sant Cugat del Vallès. En este caso, la organización juvenil de ultraizquierda vinculada a la CUP ha organizado una gimcana con pruebas como “apuntar al facha” o una formación para aprender a romper un cordón policial.

El taller, bautizado como Batallem y programado para el 25 de octubre, incluye cinco pruebas “basadas en juegos y tradiciones populares callejeras, repensadas en un tono reivindicativo”. Entre ellas, las dos citadas: telaraña policial, para romper el cordón”, y apunta al facha”.

Ante semejante propuesta, el líder del Partido Popular en la localidad, Álvaro Benejam, ha anunciado que acudirá a los tribunales si el consistorio, gobernado por un pacto entre Junts y ERC, no impide la celebración de las actividades.

Ataques impunes

La polémica llega en el mismo momento que una regidora de la CUP en Sant Cugat ha aprovechado el altavoz de un pleno municipal para denunciar un presunto acoso machista por parte de un dirigente juvenil del partido de Carles Puigdemont.

Arran se ha caracterizado desde sus inicios por protagonizar ataques terroristas de baja intensidad contra el turismo (pinchando ruedas de bicicletas y autobuses de Barcelona, que posteriormente asaltaban), contra jueces (lanzando pintura contra el domicilio del magistrado del procés Pablo Llarena), contra partidos políticos (como PP y Ciudadanos), contra comercios y contra medios de comunicación.

En este sentido, los cachorros de la CUP destrozaron la cristalera de la redacción de Crónica Global en 2018, en pleno procés, en un ataque que justificaron por considerar a este medio “cómplice” de los “ataques fascistas” mediante el uso del lenguaje y la “invención de noticias” con el objetivo de “avivar el conflicto identitario en Cataluña”. Sus actos siempre quedan impunes. Y nunca se han disculpado por ninguno de ellos.