A todas luces, la investidura de Salvador Illa parece estar atada; el PSC cuenta con los apoyos de Esquerra Republicana y Comuns Sumar y, tras la ronda de consultas previas agendada para este martes, se espera que Josep Rull convoque el pleno de la Cámara catalana para la próxima semana. Ahora bien, hasta que ese escrutinio ocurra, hay dos detalles que incomodan la estabilidad de los acuerdos bilaterales suscritos: la amenaza de Puigdemont de regresar y dejarse detener y la posible decisión de las juventudes republicanas de incumplir la disciplina de voto y oponerse a la investidura de un presidente socialista.

El Jovent Republicà, anteriormente conocido como JERC (Joventuts d’ERC), reúne este lunes al Comitè Nacional, su órgano de gestión, para debatir el sentido del voto de Mar Besses, su única diputada, al margen del de la militancia de Esquerra, que el viernes avaló por sufragio interno el acuerdo de investidura de Illa. Las miradas están puestas sobre esta decisión, pues que se trata de un voto necesario para lograr los 68 escaños de mayoría absoluta en el Parlament de Catalunya y que son exactamente los que suman las tres formaciones políticas en cuestión.

Así las cosas, los focos están puestos en el Jovent Republicà, en una jornada en la que se han cancelado los otros dos actos derivados del anuncio de Illa de querer someterse a una votación de investidura. Por el lado institucional, Rull, que había fijado para este lunes la ronda de consultas con los portavoces de los partidos, lo hará finalmente el martes, tras la petición de aplazamiento de Esquerra Republicana, por motivos de agenda. Desde el sector social, los Comitès de Defensa de la República (CDR) han desconvocado la manifestación “contra el unionismo del 155 que ocupará la presidencia de la Generalitat” que debía celebrarse a las 8 ante la Estació de França de Barcelona, sin dar explicaciones del motivo, pero después de que la Assemblea Nacional Catalana (ANC) informara de que no iban a participar y Òmnium Cultural ni siquiera llegara a pronunciarse al respecto.

“No podemos permitir que el unionismo se apodere del Govern”

“Hemos visto como el PSC, capitaneado por Salvador Illa, comparte el modelo de país con la derecha más sucursalista”, expresó el Jovent Republicà en un comunicado el pasado junio, en el que afianzó que no permitirían que “el unionismo se apodere del Govern de Catalunya” y que tampoco darían su “apoyo gratuito a quien vive del independentismo mágico y vacío de propuestas realistas”, en un contexto en que aún se barajaba la candidatura de Junts para la investidura de Puigdemont.

Tras asegurar que no les “dan miedo las urnas” de una posible repetición electoral, los jóvenes republicanos reivindicaron la necesidad de un Govern comprometido con “un referéndum de autodeterminación para votar la independencia del país”, algo que no contempla el acuerdo del PSC y ERC, y “la justicia social” en áreas como el derecho a la vivienda, los recortes o la “defensa del catalán en los colegios”.

Mar Besses, diputada del Jovent Republicà dentro del grupo parlamentario de ERC Jovent Republicà

En el caso de que el Jovent Republicà se mantenga firme sobre estas palabras, Illa perdería la primera votación, en la que necesita la mayoría absoluta de la Cámara, es decir, 68 síes. En este escenario, los socialistas necesitarían la abstención de al menos un diputado, que podría ser la propia Beses o la cesión de otro partido, para aprobar en segunda votación en la que sólo es necesario obtener más síes que noes y así ser investido con 67 escaños a favor, 66 en contra y una abstención.

Quién es Mar Besses

Mar Besses asumió su primer cargo público con tan solo 21 años, cuando fue elegida concejala en Sant Joan Despí, su pueblo natal, en las elecciones municipales de 2019, las primeras en las que tuvo derecho a voto. Cuatro años más tarde, en los comicios locales de 2023, revalidó el acta y en las autonómicas del pasado mayo concurrió como número 10 en la lista de Barcelona de Esquerra Republicana, escaño que el partido cede a sus juventudes sin estipular que protocolariamente su ocupante deba votar lo mismo que el resto del grupo.

Es hija de un periodista de Tv3 y una farmacéutica y está licenciada en Ciencias Políticas por la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), además de haber cursado un posgrado en Derecho Internacional y Justicia Penal en la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y un máster en Políticas Públicas en la Universitat de Barcelona (UB). Empezó a militar en el Jovent Republicà a los 17 años, después de haberse implicado políticamente en la pseudoconsulta sobre la independencia de Cataluña de Artur Mas en 2014. Actualmente es Secretaria de Política Municipal de la organización y milita también en ERC, además de haberse asociado a Òmnium Cultural.

Mar Besses, a la derecha, fue miembro de la Mesa d'Edat durante el pleno de constitución del Parlament, al ser la segunda diputada más joven del hemiciclo EUROPA PRESS

También son figuras de relevancia dentro de la organización Pol Baldomà, politólogo de 24 años que ejerce como portavoz nacional, y Esther Motjer, ingeniera biomédica que ejerce la presidencia del Consell Nacional.

ERC presiona

Sobre las expectativas del voto de Besses, la portavoz del grupo parlamentario, Marta Vilalta, instó a la formación juvenil a "tomar sus decisiones con la máxima responsabilidad y sentido de país" en una entrevista en RAC1 el sábado. Vilalta, que estuvo implicada en la organización y ocupó en 2012 la posición de diputada que ahora tiene la joven de Sant Joan Despí, aseguró, sin embargo, tener "el máximo respeto" por el Jovent Republicà y sus debates internos, y ha evitado dilucidar sobre el escenario que se abriría si el consejo de las antiguas JERC terminara optando por disidir de ERC.

En el mismo sentido se expresó Marta Rovira, secretaria general de Esquerra, tras anunciar el resultado positivo de la consulta a las bases y recordar que el protocolo de relación con el Jovent Republicà "implica el máximo respeto por su debate interno”.

Noticias relacionadas