El expresidente y, hasta ahora, líder moral de ERC tras su paso por la cárcel, Oriol Junqueras, ha celebrado que la secretaria general Marta Rovira haya anunciado que regresará a Cataluña en los próximos días después de que el juez de la Audiencia Nacional, Manuel García-Castellón, haya archivado la causa del Tsunami Democràtic.
En un mensaje en redes sociales, el exvicepresidente del Govern ha recordado que han compartido “muchos años de vida política, truncada, lamentablemente, por la represión de la prisión y el exilio”. “Ahora, por fin, tras siete años, será una gran satisfacción poderte reencontrar, después de un exilio que ha sido una muestra más de la injusticia que se ha perpetrado contra el hecho democrático de votar”, ha expresado.
Batalla por los liderazgos
Junqueras y Rovira han liderado juntos el partido desde 2011 y hasta hace un mes. Sin embargo, llevan tiempo inmersos en una batalla por el poder de la formación, especialmente desde que el pasado 12 de mayo, en las elecciones autonómicas, fueron apeados por Junts de la hegemonía independentista y hundidos en los 20 escaños.
Rovira considera que se debe dar paso a nuevos liderazgos, mientras que Junqueras tiene intención de repetir al frente de ERC. De hecho, dimitió de su cargo como presidente el día después de los comicios europeos del 10 de junio para iniciar una campaña por toda Cataluña. Su intención es convencer a la militancia para que le reelija en el congreso que celebrará el partido el 30 de noviembre.
La otra batalla en ERC
Pero la estrategia que debe seguir la formación no es en lo único en lo que difieren. A esta batalla se le suma la de los carteles que aparecieron en las sedes de ERC durante las municipales de 2023. Según desveló el Ara, la cúpula sabía que la campaña que se burlaba contra el alzhéimer de Pasqual Maragall -hermano del entonces candidato, Ernest Maragall- salía de las filas del grupo.
Estas informaciones obligaron a abrir una investigación interna -cuyas conclusiones se darán a conocer el viernes- y provocaron la dimisión del viceconsejero de Estrategia y Comunicación, Sergi Sabrià. Desde entonces, la tensión entre junqueristas y roviristas ha ido in crescendo, hasta el punto de acusarse mutuamente de difundir "acusaciones falsas".
El reencuentro
Con todo, hay quienes consideran que el regreso de Marta Rovira podría ayudar a fumar la pipa de la paz entre ambos dirigentes, que no coinciden en Cataluña desde 2018, ya que en marzo de ese año la secretaria general huyó a Suiza. Los últimos encuentros tuvieron lugar en la cárcel, donde Junqueras permanecía de forma preventiva antes de ser condenado, en 2019, a 13 años de por sedición y malversación.
Ahora, el expresidente de ERC está indultado, pero sigue pendiente de la amnistía para poder ejercer un cargo público. Está inhabilitado hasta 2031, de la misma forma que otros dirigentes como Dolors Bassa, Raül Romeva (ERC) y Jordi Turull (Junts).