Los sindicatos de prisiones darán hoy un nuevo plantón a la cúpula de la Consejería de Justicia. Este martes estaba previsto que los representantes de las cinco principales organizaciones sindicales se sentaran a negociar mejoras en las condiciones de trabajo de los funcionarios, después de que la semana pasada ya se reunieran con Justicia para intentar llegar a un acuerdo sobre medidas de seguridad, un encuentro que fue infructuoso y del que CSIF y CCOO se fueron a los pocos minutos.
Esta vez, después de que CSIF avanzara que no iría a la cita con la Administración Pública, se han sumado también UGT, CCOO, CATAC e Intersindical. Cabe destacar que ACAIP tampoco acudirá, pues se quedó fuera de las negociaciones al no tener representación en la mesa sectorial.
La plantilla ha virado el rumbo
Ha sido la plantilla quien ha cambiado la postura de lo sindicatos, pues los funcionarios avanzaron que, de celebrarse esta reunión, se presentarían a las puertas de la sede de la Consejería de Justicia y que lo harían uniformados para que, en caso de que los Mossos d’Esquadra decidieran dispersarlos, se viese claramente que se trataba de trabajadores públicos.
Sin embargo, fuentes sindicales niegan que hayan cambiado de opinión empujados por los trabajadores y subrayan que tienen el apoyo de la mayor parte de la plantilla, Según las mismas voces, los que se oponen a las negociaciones son sólo "un grupo reducido, extremista y ruidoso". Recuerdan que en noviembre más del 60% de los funcionarios votaron en las elecciones sindicales, las que menor absentismo registraron de todos los sectores de la Generalitat de Cataluña.
Los funcionarios, enfadados con Justicia
El motivo del enfado de la plantilla reside en que, casi un mes después del crimen de Núria López, la cocinera de la prisión de Mas d'Enric (Tarragona) asesinada a manos de un preso condenado por un delito de sangre, todavía no se ha producido ninguna dimisión.
La línea roja que han puesto los trabajadores para parar las protestas y sentarse a negociar es que o bien la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, o bien el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, dejen su cargo. Un hecho que no se ha producido. Además, las declaraciones de la consellera, que expresó que el crimen era "difícilmente previsible", indignó a los compañeros de la cocinera asesinada.
Reunión infructuosa
El jueves pasado los sindicatos se sentaron con el director general de asuntos penitenciarios de la Generalitat, Josep Maria Montero (pues a estas alturas no consideran ni a Ubasart ni a Calderó interlocutores válidos) para tratar mejoras en las medidas de seguridad de las prisiones catalanas.
Sin embargo, CSIF y CCOO abandonaron la reunión después de que se presentara un grupo técnico de trabajo y coordinación, pero que no tenía previsto implementar medidas de seguridad con carácter inmediato, algunas de ellas que ya reclamaban los sindicatos antes del crimen de Núria López.
En su lugar, proponían delegar el desarrollo de estas medidas a futuras comisiones en el Parlament, que a día de hoy está disuelto. Así las cosas, ambos sindicatos coincidieron en que la única intención que parecían tener los responsables de Justicia era "ganar tiempo" antes de las elecciones autonómicas. El resto de sindicatos dio por concluida la reunión sin ningún avance.
Ese día unos 300 funcionarios bloquearon las prisiones de Brians 1 y 2 para mostrar su rechazo hacia este encuentro de los sindicatos y la Administración, pues ya preveían que no serviría para mejorar su situación. De hecho, lo definieron como un "engaño" y "una falta de respeto" a la plantilla.