Aragonès rebaja las pretensiones de Junts: "Con Puigdemont, quedaron terceros en las últimas elecciones"
- El republicano se niega a avanzar si votará a favor de una investidura del expresident del 1-O o preferiría pactar con el socialista Illa: "Dependerá del programa"
- El jefe del Ejecutivo catalán también da detalles de su llamada con la líder de Sumar, Yolanda Díaz, a la que afea que los comunes hayan "bloqueado" sus cuentas
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Pere Aragonès ha rebajado las pretensiones de Junts, que ha llamado a Carles Puigdemont a presentar su candidatura a president para aprovechar el tirón de su vuelta a Cataluña. "En las elecciones de 2021, el número uno de Junts fue Carles Puigdemont, y quedó tercero", ha recordado sobre aquellos comicios, ganados por el PSC y con ERC como segundos, con los mismos diputados.
Cataluña ya se encuentra en plena precampaña, en una carrera hacia las elecciones del 12 de mayo en las que los catalanes se juegan el futuro de la sequía, la educación y la sanidad, que contaban con sus respectivas partidas presupuestarias; los responsables, los comunes, en los que se ha impuesto el alma radical para tumbar los Presupuestos de la Generalitat 2024.
Se niega a avanzar si apoyará una investidura de Puigdemont
El republicano también se ha negado a avanzar si ERC votará a favor en una eventual sesión de investidura del organizador del referéndum del 1-O en caso de que gane las elecciones: "Dependerá de si es posible llegar a acuerdos, qué resultados ha sacado...". De hecho, no se ha mojado sobre si prefiere votar a Puigdemont o al socialista Salvador Illa: "Dependerá delprograma y habrá que ver los acuerdos que podamos alcanzar".
Sobre el deseo de los neoconvergentes de que Puigdemont encabece su candidatura, ha expresado su "indiferencia"; sí ha reconocido que le gustaría "que pueda volver en libertad a Cataluña". "Hemos estado obsesionados en acabar con la represión y queremos que vuelvan todos", ha concluido.
Aragonès da detalles sobre su llamada con Yolanda Díaz
En declaraciones la mañana de este jueves a la emisora RAC1, Aragonès ha dado detalles de su llamada con la líder de Sumar: "Hablamos el martes, hace dos días".
"Todo el mundo estaba al caso de cómo iban las conversaciones. Yo no pedí que se diera ninguna orden, pero le trasladé que era una irresponsabilidad. Y los resultados están a la vista. No sé si es que le interesaba bloquear unos Presupuestos o por falta de poder en Cataluña", ha explicado.
Niega que el adelanto electoral busque desestabilizar a rivales
En la misma emisora, Aragonès ha defendido el adelanto electoral y ha negado que sea una estrategia para desestabilizar a rivales como Junts. Los neoconvergentes están sin candidato y fantasean con la posibilidad de que la amnistía llegue a tiempo para que Carles Puigdemont se presente como candidato a la presidencia con posibilidades.
"Tenemos una sequía que necesita que todos pongamos lo mejor de nosotros, y tenemos muchas otras urgencias. No tenemos tiempo que perder". "Hemos conseguido llegar a acuerdos en minoría durante un año y medio, pero si los Presupuestos no tiran adelante, no podemos hacer que la ciudadanía pierda un año", ha agregado.
Así las cosas, ha valorado que para él "lo más fácil" hubiese sido mantenerse en el cargo porque la oposición "no se hubiese puesto de acuerdo para nombrar a otro president". El republicano, además, ha evitado valorar acuerdos postelectorales: "Las urnas nos pondrán en nuestro lugar a cada uno y eso definirá qué margen hay de pactos"
El president lamenta la "oportunidad perdida" con los Presupuestos
Sobre el veto de los comunes a las cuentas por el Hard Rock, construcción que no contaba con ninguna partida presupuestaria, ha insistido: "Me cuesta de entender que sea por el Hard Rock, no se destinaba un solo euro, a diferencia de otros Presupuestos que sí aprobaron. Es una irresponsabilidad".
En su comparecencia tras la reunión extraordinaria del Consell Executiu este miércoles, Aragonès ya cargó contra Junts (sus exsocios en el Govern) y los comunes, a quienes ha acusado de pensar más en los intereses de partido que en los de Cataluña.
El jefe del Ejecutivo catalán lamentó que los grupos parlamentarios hayan dicho "no a 1.000 millones de euros para combatir la grave sequía", a un incremento de un 10% del presupuesto de Educación, a 1.400 millones de euros para el sistema de salud y a 1.200 euros para políticas de vivienda. "Eran muy buenos, expansivos", ha dicho este jueves sobre las cuentas, que ya jamás serán aprobadas.
Las claves tras el adelanto electoral
Los comicios anticipados no eran deseados por ERC. Hasta ahora, el president ha insistido por activa y por pasiva en agotar el mandato, incluso remodelando su Govern hace unos meses para combatir el desgaste. Sin embargo, con una representación de tan solo 33 diputados es muy difícil continuar hasta febrero de 2025, sobre todo durante la sequía.
Menos favorable es este escenario para Junts, a quienes les ha sorprendido con la maquinaria electoral a medio gas, por lo que no han dudado en jugar la carta Puigdemont. El secretario general, Jordi Turull, ha llamado al expresident organizador del 1-O a encabezar su candidatura a la presidencia de la Generalitat, confiando en que la ley de Amnistía habrá borrado ya sus delitos por el procés y pueda volver a Cataluña a tiempo para la sesión de investidura.
Por su parte, el PSC parte con ventaja en las encuestas publicadas con anterioridad al adelanto electoral, pero podría acusar el caso Koldo (el candidato socialista, Salvador Illa, fue ministro de Sanidad en aquella etapa) y las negociaciones con los independentistas por la amnistía.