Una imagen del Carnaval de Sitges

Una imagen del Carnaval de Sitges EUROPA PRESS

Política

El Carnaval de Sitges, en peligro por la trama de corrupción del ayuntamiento

La oposición denuncia que, desde que estalló el 'caso texas', la “maquinaria municipal está bloqueada” y no se dan los permisos correspondientes a las entidades que organizan la fiesta

22 enero, 2024 00:00

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El Carnaval de Sitges es una de las fiestas más populares de Cataluña. Pero este año podría estar en peligro por la situación de “desgobierno” en la que se encuentra el ayuntamiento a raíz de la trama de corrupción que afecta a su alcaldesa, Aurora Carbonell (ERC) y a otros concejales que ocuparon su cargo entre 2017 y 2022. Si bien el actual equipo de gobierno --formado por cuatro partidos-- podría tener los días contados, no será hasta después de la declaración de la republicana ante el juez el próximo 9 de febrero cuando la oposición dé un paso más y se plantee registrar una moción de censura para echarla, tal y como explicó Crónica Global.

La investigación, iniciada en mayo de 2022, trata de esclarecer si los investigados cometieron delitos de prevaricación, malversación y falsedad documental, entre otros. En concreto, se fiscaliza la actuación del Ayuntamiento de Sitges respecto a la Taula del Tercer Sector Sitges-Garraf, una entidad creada en 2014 por Joan Carles N.F --conocido como el Texas--, empresario de la localidad que también fue arrestado. Su mote ha bautizado el caso.

La alcaldesa de Sitges, Aurora Carbonell

La alcaldesa de Sitges, Aurora Carbonell AJUNTAMENT DE SITGES

No habrá bailes tras las rúas

Desde que estalló la trama, la “maquinaria municipal está bloqueada”, aseguran los partidos de la oposición a este medio, que también avisan de que son los ciudadanos los que pagan las consecuencias de la parálisis administrativa sin que sus problemas cotidianos sean abordados con la celeridad necesaria. Ocurre en cuestiones relacionadas con la educación o la sanidad, y en el ámbito lúdico, también “indispensable para la economía” del municipio.

Es el caso del Carnaval de Sitges, una de las fiestas más esperadas y que este año se celebrará del 8 al 14 de febrero. Si bien las tradicionales rúas de la Disbauxa y l’Extermini se convocarán con normalidad los días 11 y 13 de ese mes, los visitantes no podrán contar con los bailes posteriores a éstas porque las entidades que los organizan no cuentan, hoy por hoy, con los permisos correspondientes.

Las entidades no tienen los permisos correspondientes

Se trata de las históricas Casino Prado y El Retiro, encargadas de acoger estos bailes en sus respectivos teatros tras las rúas y de organizar otras actividades de carácter cultural, lúdico y recreativo. Si bien desde las entidades prefieren no vincular la investigación con la falta de permisos para llevar a cabo esta parte importante del Carnaval, desde los partidos de la oposición sí se muestran tajantes. Y es que no cabe duda de que “se trata de una fiesta de una proyección mediática muy importante”, cuya no celebración puede provocar que Sitges “deje de ser atractivo”.

Vistas de una playa de Sitges

Vistas de una playa de Sitges EUROPA PRESS

“El elevado número de investigados que hay en el consistorio provoca mucha parálisis. Esto es una fiesta lúdica y festiva, pero es muy importante porque tiene un retorno económico para nuestro pueblo”, expresan las mismas voces, que avisan de que este escándalo ha dejado al ayuntamiento y a la ciudad en una situación “insostenible”.

Un problema de orden público

Pero no es la primera vez que los sitgetans se quedan sin festejar. En fin de año, el Casino Prado ya advirtió de que no habría celebración porque todavía no tenían “permiso municipal para hacerla ni la posibilidad de adaptarnos a con los requisitos que se nos exigen para obtener la licencia de actividades extraordinaria”. Ya en diciembre avisaban de que no estaban en disposición de organizar el Carnaval de 2024, por lo que veían “imprescindible el acompañamiento municipal”. 

La ciudad de Sitges

La ciudad de Sitges EUROPA PRESS

Pero que no haya bailes también podría implicar, avisan, "problemas de orden público". Y es que, una vez finalicen las rúas --ya de madrugada--, los carnavaleros no tendrán muchas opciones para continuar la fiesta. "Cuando cierren los bares, a las tres de la madrugada, ¿dónde irá toda la gente? Podría quedarse dando vueltas por la calle", sospechan las fuentes consultadas.

Por ello, esperan que el equipo de gobierno sea previsor para que haya suficientes agentes que garanticen la seguridad en las calles de Sitges. Aun así, esperan que "la gente se comporte" para que el Carnaval no se eche a perder.