El Ministerio del Interior ha pacificado la Guardia Civil con 36 millones de euros por el cambio de año. El departamento de Fernando Grande-Marlaska ha aumentado la paga de productividad por objetivos un 71% tras recortarla a la mitad el año pasado. De 21 millones en 2022 se ha pasado a 34 millones.
Es lo que se desprende de una comunicación de Interior a los miembros del instituto armado consultada por este medio, que fija en 34 millones más otros dos a la Agrupación de Tráfico la llamada productividad por objetivos o bufanda, en argot del cuerpo de seguridad. De hecho, el plus de Fin de Año, ya abonado en nómina, era objeto de debate entre las asociaciones de la fuerza pública en los últimos meses.
De 21 a 36 millones, un 70% más
La equis de esa ecuación ya se ha despejado. Según un volante interno del ministerio de Grande-Marlaska, la bufanda llega a los 34 millones para los funcionarios de la Dirección General de la Guardia Civil y otros dos millones para los de tráfico.
El plus busca "recompensar la actuación de los guardias civiles, en la medida que con su presencia y esfuerzo han contribuido a alcanzar los objetivos" del cuerpo, defiende Interior.
Sea como fuere, el premio aumenta significativamente en relación a 2022. El pasado año, la bufanda aproximada fueron 21 millones de euros, la mitad que el ejercicio anterior. Ahora, la gratificación aumenta más de un 70%.
AUGC quería conocer la cuantía
El adeudo extraordinario en la nómina de los policías del instituto armado es relevante porque la Agrupación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) pidió al Consejo del cuerpo conocerla al detalle a mediados de diciembre.
El trasfondo son las peticiones salariales en el seno del instituto armado, que han arreciado en los últimos años. Al calor de éstas, ha conseguido la máxima representatividad Jucil, con seis representantes, ante los cuatro de AUGC, según avanzó El Español.
Renovación del parque móvil en Cataluña
Además, según explican fuentes internas de la Guardia Civil, se "está haciendo un esfuerzo para renovar el parque móvil" del cuerpo en Cataluña. La inversión busca ayudar a modernizar la operativa y dignificar las condiciones de trabajo, pero también tienen un ángulo político.
Es así porque el instituto armado ha visto que sus escasas competencias en Cataluña se situaban en la diana al tantearlas la policía catalana, los Mossos d'Esquadra. Ha ocurrido así con la nueva policía marítima de los Mossos, y con la nueva comisaría del Área Regional de Recursos Operativos (Arro) del mismo cuerpo en el Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, cuya seguridad en la zona aire está reservada a la Guardia Civil.
Tensión con Interior por la amnistía
Asimismo, el esfuerzo de Interior con el plus por objetivos llega tras un año en el que algunos círculos de la Guardia Civil criticaron al Gobierno por la futura ley de amnistía para los independentistas encausados y condenados por el procés en Cataluña. Esa oposición parcial cristalizó en una concentración de policías ante la Ciudad de la Justicia de L'Hospitalet de Llobregat el 10 de noviembre.
Antes, en abril, el Ejecutivo y los círculos conservadores del instituto armado mostraron sus agendas dispares antes del homenaje al general Antonio Escobar Huerta, fusilado por el franquismo y a quien Interior restituyó con todos los honores en Barcelona en abril.
Antes de esa cita histórica, inédita hasta entonces, Jucil programó una rueda de prensa con un memorial de agravios y peticiones al equipo de Grande-Marlaska.