Garantizar el aborto: el principal derecho de la mujer que todavía se vulnera en Cataluña

Del total de denuncias recibidas en este tiempo, el 61,13% versan sobre la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE). Destacan la falta de información sobre cada uno de los métodos para abortar, la ausencia de capacidad para decidir sobre el método que quiera utilizar, así como no poder abortar de manera segura, libre y gratuita.

Problemas en la semana 22 de embarazo

Así lo expone en su último informe sobre derechos sexuales y reproductivos, donde también alertan de un volumen importante de denuncias vinculadas a situaciones de mujeres que quieren interrumpir su embarazo y están de 22 semanas.

Entre las 14 y las 22 semanas, la ley solo permite abortar si existe un diagnóstico médico que lo justifique. "Se les dificulta el acceso a la información y al propio aborto", aseguran. 

El acceso a un proceso seguro y gratuito se complica todavía más si eres inmigrante, pues el proceso de la interrupción voluntaria del embarazo puede convertirse en una carrera de obstáculos contrarreloj. Su situación administrativa irregular y la falta de padrón son unas de las principales trabas con las que se encuentran estas mujeres.

Una mujer realiza un test de embarazo

Anticonceptivo de urgencia

La segunda vulneración más habitual que pone sobre la mesa el informe es el acceso al anticonceptivo de urgencia. Más conocido como la píldora del día después, está presente en el 15,4% de los casos atendidos. Las mujeres denuncian dificultades de acceso a esta pastilla, tanto en centros públicos –ambulatorios, hospitales…– como farmacias, incluso en el teléfono 061 de información sanitaria.

Aseguran haber recibido información errónea como que "las menores de 16 años no pueden acceder a este anticonceptivo", "que sólo se puede pedir tres veces al año" o que "es necesaria una valoración previa por un profesional de la salud", explican desde el observatorio. "Todo esto son mitos", aseguran desde el organismo.

Violencia obstétrica

La violencia obstétrica también ocupa un lugar en las vulneraciones más detectadas. Las prácticas llevadas a cabo por profesionales de la salud sobre las mujeres durante el embarazo, el parto y el puerperio, que por acción u omisión son violentas o pueden ser percibidas como violentas, se detectan hasta en un 2,74% de las denuncias recibidas.

La mayor parte hacen referencia a episiotomías –una cirugía menor hecha durante el parto para ensanchar la abertura de la vagina– llevadas a cabo sin consentimiento, maniobras reconocidamente contraindicadas para el descenso del feto como la maniobra de Kristeller, maltrato verbal o no respetar el plan de parto acordado.

Un bebé recién nacido en una imagen de archivo PIXABAY

Consejería de Salud

Pocos días después de que el Observatorio hiciera público el informe, la Generalitat de Cataluña anunció la elaboración de un "plan pionero" para luchar contra la violencia obstétrica y la vulneración de derechos sexuales y reproductivos en Cataluña que incluye 50 acciones.

Dotado con siete millones de euros, tiene como objetivo aumentar la sensibilización y la información sobre los derechos sexuales y reproductivos, incrementar la formación y la capacitación profesional, y mejorar los servicios de atención y acompañamiento. Mientras, desde la entidad recuerdan que las instituciones son responsables de garantizar el ejercicio pleno de estos derechos, ya que muchos todavía se ven vulnerados.