La portavoz del Govern, Patricia Plaja, ha comparecido este martes tras la reunión del primer Consell Executiu, después las elecciones generales del 23J, con un programa descargado de acuerdos políticos y de autocrítica por el descalabro del independentismo del pasado domingo.
El único punto en clave política que se ha colado en los acuerdos tomados por el ejecutivo de Aragonès esta semana, ha sido el de intensificar esfuerzos para vender, más y mejor, a Cataluña en la Unión Europea con una reestructuración la consejería de Exteriores.
Con la vista puesta en Europa
Para alcanzar ese objetivo, ha detallado la portavoz, se reforzará el Departamento de Acción Exterior, recientemente renombrado como Dirección General de Asuntos de la Unión Europea. Actualmente, Cataluña cuenta con 21 delegaciones, la cifra más alta de la historia, que llevan el Ejecutivo autonómico a más de 72 países de todo el mundo.
Según Plaja, para el Govern es prioritario reforzar las relaciones con Bruselas y posicionar a Cataluña como "un actor fiable y reconocido en la UE, y con más capacidad de influencia".
La consellera de Acció Exterior i Unió Europea, Meritxell Serret, ya avanzó la semana pasada que el Govern trabajaba en un plan específico para los próximos tres años. La consejera condenada por desobediencia el 1-O anunció que el objetivo de Cataluña es tener una mayor presencia en todo el mundo.
Esperando la "valentía" de Pedro Sánchez
En cuanto a la postura del Govern con la conformación del Gobierno, es de absoluta tranquilidad e inmovilismo. Sobre todo, sabiendo que tienen "la sartén por el mango" para que Sánchez llegue a La Moncloa o para mandar al país a una repetición electoral, si no satisface sus peticiones en una clara confusión entre los intereses partidistas y de la institución de la Generalitat.
Según ha insistido la portavoz en varias ocasiones, el presidente del Gobierno en funciones y candidato del PSOE a la reelección, Pedro Sánchez, debe ser "valiente y mover ficha" ante las demandas de los independentistas si quiere los votos de Junts y ERC para ser investido. "Tiene que escuchar a los partidos que tienen la llave. Le tocará escuchar las reclamaciones, lo que le pidan, porque el inmovilismo no le llevará a La Moncloa", ha advertido.
Eludiendo la autocrítica
Tras ser preguntada en varias ocasiones si ERC "ha reflexionado" tras el batacazo electoral, en el que perdió más de 400.000 votos, Patricia Plaja ha echado balones fuera. Ha dicho que el pasado domingo se votó en "clave española", por lo que vincula el descalabro de los republicanos a una polarización del estado español en una nueva confusión entre sus atribuciones como portavoz de la Generalitat y del partido que la ha nombrado en el cargo.
La portavoz ha destacado que en la última legislatura en el país "se han dado pasos relevantes, como conseguir la libertad de los presos independentistas o la derogación de la sedición", avances todos ellos que considera buenos para el independentismo catalán.