La campaña de abstención promovida desde determinados sectores del secesionismo para castigar a sus representantes políticos por no imponer su anhelada "república catalana" ha puesto muy nerviosos a los mandatarios de ERC, Junts per Catalunya y la CUP y a sus entidades afines. Si esta misma semana el expresidente de la Generalitat fugado de la justicia, Carles Puigdemont, imploraba el voto a estos partidos a través de su autodenominado Consell per la República, este viernes ha hecho lo mismo Xavier Antich, presidente de Òmnium Cultural.
La asociación ultranacionalista se ha desmarcado de este modo de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) -una de las impulsoras iniciales de la campaña abstencionista de cara a las elecciones generales del 23J- y, a diferencia de ésta, ha hecho un llamamiento a "llenar masivamente las urnas" contra la "estrategia de Estado" que, a su peculiar modo de ver, pretende convertir el independentismo en "irrelevante".
"Hace falta contarnos"
"En cada elección hace falta contarnos: nos contamos nosotros, nos cuenta el Estado y nos cuenta la comunidad internacional", ha manifestado Antich en un discurso ante la asamblea general de socios de Òmnium este viernes en Lleida.
El dirigente de esta entidad privada con la cual simpatizan los mandatarios de la Generalitat considera que "el país" necesita "una sociedad civil fuerte y que el independentismo sea relevante", por lo que insta a la ciudadanía a ir a votar.
El llamamiento de Antich contrasta con la consulta que la ANC ha convocado entre este viernes y el lunes para que sus socios decidan si están de acuerdo con pedir la abstención o el voto nulo en las elecciones generales del 23 de julio, en lugar de apoyar a los partidos independentistas.
Temen el "castigo" del electorado
Antich, en cambio, reclama lo contrario y pide "responsabilidad" a estos partidos para que "estén a la altura" y abandonen lo que llama "el cortoplacismo".
Después de los malos resultados obtenidos por las formaciones secesionistas en las pasadas municipales del 28 de mayo, el mandatario de Òmnium ha lamentado que "hace tiempo que la ciudadanía castiga con su abstención que no haya un proyecto compartido", ha dicho.
"Populismo"
A su modo de ver, el ultranacionalismo catalán que defiende debe apostar por "iniciar un nuevo ciclo político e incluir nuevos liderazgos en el movimiento, para superar la lógica autodestructiva, las derivas antipolíticas" y el "populismo".
La asamblea ha servido también para renovar algunos miembros de la junta de la entidad, tras las renuncias de Joan Vallvé, Lluís Duran, Marc Sanjaume y Iolanda Fresnillo, que han sido sustituidos por Toni Borrell, Jordi Corrons, Laura Cendrós y Mariona Lladonosa como nuevos vocales.