El TSJC juzgará a Puig en la causa de Sijena y Vila responderá ante los juzgados de Barcelona

El exconseller de Cultura del Govern y actual diputado del Parlament de Cataluña Lluís Puig se sentará ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) para responder por un presunto delito de desobediencia por su conducta “omisiva” en lo que se refiere al traslado de determinadas obras desde el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) al Monasterio de Sijena.

Lo hará solo, pues el TSJC se ha inhibido de la causa del también exconseller Santi Vila, quien tendrá que dar explicaciones en los juzgados penales de Barcelona por no tener una conexión lo suficientemente fuerte con las acciones de Puig y no ser actualmente una persona aforada. Ambos políticos no habrían atendido e incluso habrían llegado a obstaculizar la decisión de traslado que tomó el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Huesca cuando los dos formaban parte del Ejecutivo de Carles Puigdemont.

Bienes del Monaterio de Sijena, en Huesca / EP

Las acciones de Vila fueron "eminentemente activas"

El Tribunal Supremo declaró la competencia del TSJC para el conocimiento de la causa contra Puig el pasado 4 de enero. La Sala II de este órgano consideró que el hecho enjuiciado habría tenido lugar en el territorio de Cataluña.

En el caso de Vila, cuya defensa alegó que la “conexión” entre las presuntas acciones de este y las de Puig debía ser “superior a lo normal y determinante” para que el enjuiciamiento fuera conjunto, será el Juzgado Decano el que proceda al reparto del proceso que se sigue contra él. Según el auto de la sala civil y penal del TSJC, las acciones de Vila fueron “eminentemente activas”, con un cumplimiento “parcial e insuficiente” del requerimiento judicial. 

Pinturas murales del Monasterio de Sijena / MNAC

Desobediencia "reiterada"

Tanto el ministerio fiscal como la acusación particular, que representa al Ayuntamiento de Villanueva de Sijena, imputan a los dos acusados un presunto delito de desobediencia. 

Las dos partes concluyeron originalmente que la desobediencia de Vila y Puig se cometió de forma conexa, “reiterada” y “sucesivamente en el tiempo” ante los requerimientos judiciales que instaban al traslado de las obras.