El ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa / EFE

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa / EFE

Política

El Gobierno cede ante comunidades como Cataluña y amplía las reuniones navideñas a 10 personas

Aun así, el Govern independentista se ha abstenido en la reunión de representantes autonómicos quejándose de que la competencia es suya

2 diciembre, 2020 19:49

El Gobierno español ha cedido a las presiones de comunidades autónomas como Cataluña para permitir reuniones familiares de hasta 10 personas en las festividades navideñas --niños incluidos--, en lugar del máximo de seis que había anunciado días atrás.

El Ministerio de Sanidad, no obstante, ha insistido en la importancia de evitar el contacto social y las aglomeraciones para evitar contagios de la pandemia de coronavirus y mantener las restricciones de movilidad durante las fiestas. Así, insta a que las Navidades, en caso de celebrarse, sea en casa y con dos grupos de convivencia como máximo.

Cataluña se abstiene

Entre los acuerdos consensuados en su reunión de este miércoles con los dirigentes autonómicos figuran, además del límite máximo para las reuniones familiares de los días 24, 25 y 31 de diciembre y 1 de enero, la restricción de los desplazamientos entre comunidades autónomas --salvo si es para acudir a un encuentro familiar, o justificados por el estado de alarma-- del 23 de diciembre al 6 de enero; y ampliar el toque de queda domiciliario hasta la 1.30 de la madrugada los días de Nochebuena y Nochevieja, si bien cada comunidad podrá adelantarlo si lo ve necesario. El resto de días regirá el horario que tengan establecido.

Aun así, el gobierno independentista de la Generalitat se ha abstenido en la votación del plan de flexibilización de restricciones para las fiestas navideñas propuesto en el Consejo Interterritorial de Sanidad, aduciendo que se trata de una competencia autonómica, a pesar de ser casi idéntico al aprobado por el propio Govern.

Madrid vota en contra

Por lo demás, todas las comunidades --salvo Madrid, que ha votado en contra, y Cataluña--, han apoyado las medidas propuestas por el Ministerio de Sanidad para esta Navidad. Fuentes del Departamento de Salud de la Generalitat han informado de que su abstención se debe a que no se sienten "interpelados por este acuerdo, porque el lugar de decisión sobre estas cuestiones es el Procicat y el gobierno de Cataluña, y no el Consejo Interterritorial".

Las mismas fuentes han asegurado, asimismo, que Cataluña "se basará en el plan de Navidad aprobado hoy en el Procicat y en el plan de apertura progresiva aprobado hace dos semanas".

Obligado cumplimiento

Sin embargo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha dejado claro en su rueda de prensa posterior que las normas sanitarias del Gobierno central son de obligado cumplimiento, se circunscriben al estado de alarma vigente hasta 9 de mayo y, por tanto, no es necesario publicarlo en el BOE. "No se toman las medidas por gusto ni para entorpecer la vida de nadie", ha advertido, recordando la gravedad de la pandemia. Illa, asimismo, ha resumido que el acuerdo de las comunidades se resume en una frase: "En Navidad nos quedamos en casa y limitamos todos los movimientos prescindibles".

Illa ha reiterado su llamamiento a la ciudadanía para cumplir las medidas y también evitar aglomeraciones: "Nos jugamos mucho en el mes de diciembre, ha costado mucho doblegar la curva de la segunda ola y queremos mantener estos parámetros descendiendo todavía más".

El caso del comercio y la restauración

Por lo que respecta a los comercios y a la restauración, estos establecimientos se regirán por las normas de aforo y horarios que estén vigentes en cada comunidad autónoma. En bares y restaurantes se recomienda ponerse la mascarilla cuando no se esté comiendo y bebiendo.

Y algo parecido ocurrirá en el caso de las celebraciones religiosas. En espacios cerrados, estas seguirán las normas que dicte cada comunidad.

Estudiantes y residencias

Sanidad y comunidades recomiendan, por otra parte, a los estudiantes que regresan a casa para las vacaciones que limiten las interacciones sociales y extremen las medidas de prevención los 10 días antes. Una vez en sus domicilios familiares, deberán limitar los contactos y respetar su burbuja de convivencia.

En el caso de las personas que residen en centros sociosanitarios, el Gobierno recomienda que, si salen, queden restringidas a un solo domicilio y manteniendo una burbuja de convivencia estable.