La ‘trama rusa’ aflora el gran negocio oculto con el ‘procés’
El sumario judicial demuestra cómo Madí, Soler y Vendrell, embaucados por los delirios estrategas de Terradellas, se lucraron del proyecto independentista, y su desprecio por Puigdemont, Torra y Mas
31 octubre, 2020 00:00Dirigentes independentistas que utilizaban sus influencias para acceder a contratos de la Generalitat. Nostálgicos de la lucha armada aficionados a la geoestrategia. Empresarios dispuestos a sacar partido del procés. La conocida popularmente como la trama rusa ha destapado el gran negocio de un proyecto independentista sin posibilidades de éxito pues, a lo largo del sumario del juez Joaquín Aguirre, quienes estaban llamados a liderar esa transición a la república --Carles Puigdemont, Quim Torra, Artur Mas...-- son tildados de “fracasado”, “desequilibrado” o “inconsistente”, “pobrecito” o “subnormal político profundo”.
Dicho de otra manera, cerebros en la sombra de gobiernos catalanes como David Madí y Oriol Pujol, o militantes de Terra Lliure o MDT que abandonaron la lucha armada como Xavier Vendrell o Víctor Terradellas, desfilan por una instrucción judicial que arrancó hace dos años con la investigación del desvío de dinero de la Diputación de Barcelona a fundaciones vinculadas a CDC y derivó en una segunda pieza separada, la que ha propiciado las detenciones de los responsables de la logística financiera del procés.
El origen de la 'operacióm Voloh'
Ambas diligencias tienen un protagonista común, Víctor Terradellas. El exdirigente de CDC y presidente de fundaciones dedicadas supuestamente a la cooperación con el tercer mundo, engrasadas a base de subvenciones de la Generalitat y de la Diputación, pero que en realidad funcionaban como tapadera de la internacionalización del procés.
Una de las grandes incógnitas de la operación Voloh es cómo Terradellas pudo embaucar a Madí y Soler, personajes influyentes y respetados en las órbitas convergente y republicana, respectivamente. Prometió el apoyo de Putin y Gorbachov, así como la financiación de China, a la declaración unilateral de independencia (DUI), despliegue de 10.000 soldados rusos incluido.
Los 10.000 soldados rusos de Terradellas
La Guardia Civil da cuenta en las transcripciones de las grabaciones efectuadas de ese supuesto farol de Terradellas, lo que no impidió que éste siguiera ejerciendo su influencia en Madí y Vendrell. Al igual que ellos, el conseguidor siempre dudó de que los sucesivos presidentes del gobierno independentista fueran capaces de implementar la república catalana. “Puigdemont ha sido un fracaso”, “Torra también es otro error”, “Artur Mas, el pobrecito”… afirma Terradellas, quien solo ve a Jordi Cuixart, presidente de Òmnium que cumple condena por el referéndum del 1-O, como el dirigente capaz de lograr el estado propio.
Los calificativos irían subiendo de tono. Artur Mas “dejó a (Josep) Rius, dejó a (Joan Maria) Piqué, a toda esa carroña”, afirma Terradellas en referencia a estos asesores de Torra y Puigdemont. Madí llama al expresidente inhabilitado de “subnormal político profundo” y al líder de ERC, Oriol Junqueras, “desequilibrado”.
Los negocios de Madí
De Madí, así consta en las diligencias, "se desprende su interés en el mercado de las VTCs" así como "un importante tráfico de influencias con altos cargos del Departamento de Territorio como el consejero Damià Calvet, el Secretario de Infraestructuras Isidre Gavín, el Subdirector de Ordenación del Transporte, Josep Maria Fortuny y el nuevo Director General de Transportes, David Daldoni".
El que fue mano derecha de Artur Mas “ha logrado contratos con prisiones, dependiente de la secretaría de medidas penales, reinserción y atención a la víctima del Departamento de Justicia y con la pretensión de acceder a la directora de servicios del departamento para saber la forma en que se licitará el contrato definitivo. Todo parece indicar que la intención es obtener información privilegiada que les permita hacerse con la adjudicación”.
Sacar tajada de la crisis sanitaria
Esos contactos “se han hecho extensivos a la Agencia Catalana del Agua para lo que Madí trata de influir en Lluís Ridao, su director, con el objetivo de que se realice un concurso sobre la detección de Covid en agua. Hasta tal punto llega su esfera de poder que pretende proponérselo a Salvador Illa, ministro de Sanidad, accediendo a él a través de José Luis Ábalos, ministro de Transportes”, indica el documento judicial.
Madí, asimismo, intentó “obtener rédito económico de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Esos negocios pasaron por activar una vez más, sus contactos políticos, como Víctor Cullell, secretario de Govern, o Braulí Duart, secretario general de Interior. Este último le explicó el desbarajuste que se estaba viviendo en la gestión de la crisis”. Si bien hasta el momento no se ha podido corroborar si esas intenciones fructificaron, no es descartable que David Madí se haya podido ver beneficiado por alguna adjudicación pública.
"Estructura clientelar"
La investigación sobre Xavier Vendrell “está poniendo de manifiesto una estructura clientelar en la administración catalana en la que impune y arbitrariamente se reparten los fondos públicos”, afirma el juez.
Residencias y test rápidos
Son varios los negocios en los que Vendrell parece querer aprovechar sus contactos políticos. Las observaciones telefónicas han puesto de manifiesto el interés del exdiputado de ERC en el tratamiento de residuos de determinados municipios vinculados fundamentalmente a este partido, llegando a tocar a 700 ayuntamientos de los que hasta el momento el más importante y donde parece que las negociaciones estarían más avanzadas es el de Sant Cugat del Vallès.”
Vendrell también intentó beneficiarse de la crisis del coronavirus. “Participó en la gestión de los centros que se abrieron para ingresar a personas procedentes de residencias afectadas por la enfermedad Covid-19. A cambio percibió 5.000 euros. Además, intentó obtener un mayor rédito económico a través de asociarse con Sergio Brenner, David Anidjar y David Madí para proveer de test rápidos a la administración catalana sin que se haya podido determinar si tales intenciones fructificaron”.
Todo ello demuestra el gran negocio que, para algunos políticos y empresarios, ha supuesto el procés y su prolongación en el tiempo. Una suerte de nuevo caso 3% que las investigaciones judiciales deberán demostrar.