Ramon Espadaler, exsecretario general de UDC y líder de Units per Avançar / CG

Ramon Espadaler, exsecretario general de UDC y líder de Units per Avançar / CG

Política

Las lecciones catalanistas de Units

La formación de Espadaler, quien sabe por experiencia que las prisas son malas consejeras, no se cierra a tender puentes con otras formaciones, rechaza un referéndum y apuesta por un Pacto de Estado

24 septiembre, 2019 00:01

El nuevo catalanismo toca a rebato. Lo hace en forma de proyecto político, en el caso de Lliga Democràtica y Lliures, o de cónclave transversal en Poblet (Tarragona) con vistas a lanzar un órdago a la radicalidad de Carles Puigdemont. El común denominador es un nacionalismo moderado, heredero de la antigua Convergència, que aspira a propiciar la ruptura de PDeCAT con el unilateralismo del expresidente de la Generalitat.

Uno de los partidos invitados a formar parte de ese movimiento es Units per Avançar, que lidera Ramon Espadaler, exdirigente de la histórica UDC.

Grandes ausentes

Fueron los grandes ausentes del almuerzo organizado el pasado miércoles por Lliga y Lliures --solo acudieron dos militantes de Units de Sant Cugat del Vallès a título personal--, pero el motivo es simple. “Nosotros no somos independentistas, no defendemos una consulta, y no queremos participar en debates que tengan como objetivo crear nuevos instrumentos electorales”, explica a Crónica Global el propio Espadaler, que aboga por la formula Herrero de Miñón.

Por el contrario, la formación nacida tras la desaparición de UDC sí que ha estado representada en la reunión del sábado. Albert Batlle, teniente de alcalde de seguridad en el Ayuntamiento de Barcelona y que en breve se incorporará a la ejecutiva de Units, participó en la elaboración de los documentos preparativos de esa cita de Poblet, a la que acudieron Quim Llimona y otros dos miembros de Units. Batlle es una de las caras visibles de la presencia institucional de Units, que gobierna en La Pobla de Mafumet (Tarragona), tradicional feudo de UDC, y está presente en un total de 30 ayuntamientos.

Albert Batlle, teniente de alcalde de Seguridad en Barcelona / EFE

Albert Batlle, teniente de alcalde de Seguridad en Barcelona / EFE

Units formó parte de las listas del PSC en las últimas elecciones catalanas, lo que le ha permitido tener representación también en el Parlament. “Batlle ha sido un salto cualitativo y que nos ha consolidado. Ha abordado el problema de la inseguridad en Cataluña sin hacer concesiones a la demagogia y al buenismo”, afirma Espadaler, exconsejero de Interior.

El balance que hace, tanto el PSC como el partido de Espadaler, de esa coalición es positiva. Algunas federaciones socialistas, como la de Barcelona, se mostraron reacias a ese pacto, pero la convivencia en el grupo parlamentario ha sido buena --Units ha roto la disciplina de voto en temas de Educación, pero eso es algo que estaba previsto--, de ahí que Units quiera repetir.

En contra de un referéndum

Por eso, el equipo de Espadaler mira con distancia el proyecto político de Lliga y Lliures. Sobre todo, porque Units se opone una consulta, mientras que Josep Ramon Bosch y Antoni Fernández Teixidó no rechazan ese referéndum. La apuesta del expresidente de Sociedad Civil Catalana y del exdirigente de CDC ha provocado bastante controversia. Eva Parera, concejal en el Ayuntamiento de Barcelona y una de las impulsoras de Lliga se ha demarcado por ese tono nacionalista que, a su juicio, está lejos de los propósitos iniciales de un proyecto que también secundaba Manuel Valls. Por su parte, 80 militantes de Lliures han desautorizado a Teixidó por acudir a la comida del pasado miércoles.

Tender puentes

Units no entra en esas polémicas. Entre otras cosas, porque cree que, a largo plazo, se pueden --y deben-- tender puentes en ese espacio catalanista. “Pero hay que ser prudentes. La precipitación no es buena y eso lo sabemos en Units”, explica Espadaler.

Se refiere a los 100.000 votos que logró UDC en las elecciones autonómicas de 2015, a las que concurrió tras romper con CDC. No obtuvo representación. Dos años después, la extinta Unió se reconvertía en Units per Avançar.

“Nuestras propuestas para Cataluña son muy claras. Queremos un Pacto de Estado que permita el encaje de Cataluña en España mediante un autogobierno de calidad, competencias estables y una financiación clara que resulte útil para las personas”, añade Espadaler.