Un alcalde de Lleida cree haber patentado la señal de STOP en catalán
Carles Comes ha instalado placas metálicas en los cruces de Torrelameu en las que se lee "PAREU", el diseño de la traducción del alto que le autorizó el Ministerio de Industria
12 marzo, 2019 00:00El alcalde de la localidad leridana de Torrelameu, Carles Comes i Marco, no tiene patentada la señal de stop en catalán, se trata sólo de un diseño industrial, según revela en su blog Francisco José Moreno Gómez, funcionario en la Dirección General de Industria y de la PYME y anteriormente en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM).
El diseño lo ha solicitado el alcalde como persona física (Carles Comes i Marco), por lo que decir, como dice la web del canal 324 de la televisión pública catalana, que “L’Ajuntament ha patentat” es doblemente falso (ni hay una patente ni es del ayuntamiento).
Una foto del alcalde de Torrelameu, Carles Comes (ERC)
La solicitud con fecha del reférendum
No hay ninguna patente involucrada, sino que se trata de un diseño industrial que, por cierto, la OEPM concede mediante un procedimiento ultrarrápido de simple registro. En este caso, el alcalde presentó su solicitud de diseño (D0528919) el 1 de octubre de 2018 (fecha nada casual) --ironiza el funcionario-- y la OEPM lo concedió el mismo día, publicándose la concesión el 4 de octubre.
El experto Francisco José Moreno explica cómo en la misma solicitud de diseño es posible incluir varias figuras. Así, el alcalde reivindicaba cuatro formas de decir STOP en catalán (PARA’T, PAREU, ATURA’T, PARI) con y sin un margen blanco, en 8 figuras.
El diseño industrial del stop en catalán
Cobrar royalties
Si el alcalde pretendiera pedir royalties a las atracciones de feria o a los otros alcaldes que quisieran poner un PAREU en el parque infantil de tráfico, podría hacerlo con su diseño. Sin embargo, al funcionario le ha llamado la atención que el alcalde parece sugerir que por el hecho de tener un diseño registrado, el “Ministerio de Industria” le ha dado permiso para usarla como señal de tráfico real, “con la condición de que mantenga la forma octogonal y los colores blanco y rojo”.
Señal de STOP en catalán en Torrelameu
Francisco José Moreno deja claro que tener un diseño no es una autorización para fabricar productos que incorporen el diseño, ya que, como señala la propia Ley del Diseño “la explotación del diseño no podrá llevarse a cabo de forma contraria a la ley, la moral, el orden público o la salud pública, y estará supeditada, en todo caso, a las prohibiciones o limitaciones temporales o indefinidas establecidas o que se establezcan por las disposiciones legales”.
La DGT tiene la última palabra
Si el alcalde quería realmente una autorización debería haber ido a la DGT (Ministerio del Interior) o quizás a la Dirección General de Carreteras (Ministerio de Fomento) que son los competentes para definir qué señales de tráfico son las permitidas en las vías públicas.
Registro del diseño de la señal de tráfico en catalán
“Me pregunto cuánto le cobrará al resto de administraciones públicas catalanas que quieran sumarse a la iniciativa por cada señal “normalizada” y si el dinero irá a parar a su cuenta corriente o a la del ayuntamiento”, concluye el experto en patentes del Ministerio de Industria.