La tradición de comer coca de San Juan es una parte esencial de las celebraciones de la mítica noche del 23 al 24 de junio, una festividad que marca el solsticio de verano y es una de las más esperadas del año.
La coca de San Juan es una delicia que no puede faltar en esta celebración, hecho con una masa dulce y esponjosa, que puede llevar diversos ingredientes y rellenos. Las versiones más comunes incluyen frutas confitadas, piñones, crema pastelera o mazapán.
Recientemente, se ha celebrado el concurso de la Mejor Coca de Sant Joan, que este año celebra su sexta edición y establece premios en cinco categorías: tradicional, de crema y piñones, de llardons, de chocolate y creativa.
La mejor coca de chocolate de San Juan
Se acerca la noche de San Juan y es tradición reunirse con amigos, comprar coca y brindar por una noche mágica. Por eso, si estás pensando en comprarte una, nosotros te proponemos un buen sitio: el Forn Gil, en Barcelona, ganadora del concurso a la mejor coca de chocolate de este San Juan 2024.
Es una coca elaborada por la pareja Gerard Gil y Esther Real, panadero y pastelera respectivamente, en la que combinan dos masas, dos texturas, dos almas y mil sabores. Es como una coca tradicional de brioche clásico con brownie de cacao.
En una entrevista a Hule y Mantel, los creadores de esta coca del Forn Gil, explicaron que la idea de usar el brownie surgió tras varias semanas de prueba intentando integrar el sabor del cacao en la propia masa. Sin embargo, se perdía mucha intensidad, ya que no podían cargar el brioche tanto como ellos querían. Todo esto sin olvidar, que han buscado ser fieles -en todo momento- a la coca original, pero con mucho sabor a cacao.
La receta de la coca de brioche
Una de las claves de esta coca es el brioche: con buena mantequilla y de huevo, para que sea esponjosa y no quede seca. Emplean para ello, también, la piel del limón, agua de azahar de naranja y semillas de las vainas naturales de la vainilla.
Para la receta utilizaron chocolate del 70% para conseguir un sabor más intenso porque apuntan que reduce mucho el dulzor del mismo. Así no empalaga, gana sabor y ayuda a que el conjunto sea más equilibrado.
Según explican a Hule y Mantel, empiezan con la elaboración de un brownie tradicional delgado de algo más de 1 cm de altura y le añaden nueces pecanas garrapiñadas. Después pusieron el brownie como base y luego lo cubrieron con la masa de brioche.
Para elaborar el brioche, que necesita de fermentación, hay que estirarlo para darle la medida de la base -tal y como lo hacen los pizzeros-. Es importante que el brioche tape el brownie, por los lados y que, visualmente, parezca una coca de brioche dorada.
Para finalizar, se deja levar, se le ponen los toppings -crumble de chocolate salado, piñones, azúcar y nueces garrapiñadas- y se hornea unos nueve minutos, siempre que el brownie ya esté hecho. ¡Y ya tendríamos una coca deliciosa, aunque te recomendamos que la encargues en el Forn Gil por solo 35€!