
Juan Roig, presidente de Mercadona
Cada vez resulta más habitual encontrar artículos y reportajes en la prensa económica internacional acerca de la gran empresa española. Su progresiva internacionalización y crecimiento facilita que sus casos de éxito sean reflejados en medios que son referencia en todo el mundo. Ayer miércoles, Financial Times dedicaba un extenso artículo a Mercadona. Pero su valor iba mucho más allá de uno de estos casos de éxito.
Porque en la pieza no figura ni una mención a la cuenta de resultados. No se habla de ingresos, de deuda, de Ebitda, de inversiones… tampoco de fusiones y adquisiciones. Mercadona es noticia en el FT, considerado como “la Biblia” de la prensa económica mundial, nada menos que por su estrategia en el ámbito laboral. El rotativo británico considera al imperio de la distribución que controla y preside Juan Roig como un paradigma de que “las buenas prácticas dan resultado”.

Aspectos como la flexibilidad de horarios, sueldos por encima de la media del sector, oportunidades para la promoción interna y reparto de los beneficios entre los trabajadores desfilan a lo largo del reportaje como los auténticos pilares de la meteórica trayectoria empresarial de Mercadona.
No se trata de compras espectaculares de miles de millones de euros; ni de operaciones a mayor gloria de la banca de inversión. Se trata de algo más elevado. Que un referente como el FT destaque de una empresa española situar el bienestar de sus trabajadores en el lugar más alto de sus prioridades y que preferir repartir beneficios entre los empleados que dividendos entre los dueños resulta tan valioso que no tiene precio.
Y, además, representa un ejemplo a seguir. Porque, como se afana en destacar el rotativo, lo mejor de estas prácticas es que funcionan. Una vez más, la familia Roig se ha ganado estar de enhorabuena. Y con ella, los más de 100.000 empleados que componen una mucho mayor llamada Mercadona.