La consellera de Educación de la Generalitat, Anna Simó, durante una sesión de control al Govern, en el Parlament EUROPA PRESS
Anna Simó
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La Generalitat de Cataluña se escuda en la no aprobación de sus presupuestos de 2024 para justificar su recorte del vale escolar en la autonomía. El Govern de ERC ha incumplido su promesa de hace apenas un mes, cuando anunció que ayudaría a las familias de los alumnos de primaria y secundaria con 70 euros canjeables por material escolar, y ha rebajado esa cantidad a sólo 60 euros. Una cifra que, además, queda lejos de los 100 del año pasado para los alumnos de primaria.
Este nuevo desengaño se suma a la larga lista de despropósitos protagonizada por la conselleria de Educación -además de la de Economía- a lo largo de la pasada legislatura. Un mandato marcado por la pésima gestión de Josep Gonzàlez Cambray, primero, y de Anna Simó, después, reflejada en datos irrefutables y lamentables como, por ejemplo, la omnipresencia de barracones escolares, la falta de profesores, o los alarmantes malos resultados del sistema educativo catalán -a la cola de toda Europa- en el informe PISA.
