Hèctor López Bofill
Hace tiempo que Junts per Catalunya (JxCat) debería haber cambiado su política de fichajes si aspira a ser un partido serio. Una transversalidad mal entendida ha dado cabida en esta formación a personajes como Hèctor López Bofill, concejal en Altafulla (Tarragona) y profesor de la Universitat Pompeu Fabra.
A este cargo público, con sueldo pagado por todos los catalanes, le gusta el discurso bélico, advertir de que, sin violencia, Cataluña nunca será independiente y que en el referéndum de Montenegro --invocado ahora por ERC-- hubo disparo de metralletas. Es muy posible que lo último no sea verdad, pero al profesor se la trae al pairo.