Jaume Giró
La Generalitat rescindirá anticipadamente la concesión del Eix Transversal. El Govern pagará a Cedinsa un mínimo de 483 millones de euros para recuperar la gestión de la autovía C-25. La compañía ha mostrado su oposición a la operación y se da por hecho que recurrirá la decisión del Ejecutivo autonómico. Y es que, por más que el conseller Jaume Giró haya sacado pecho, la cancelación de la concesión no es una buena noticia para Cataluña. La imagen de la Generalitat sale tocada pues la maniobra deja en entredicho la seguridad jurídica, un elemento fundamental a la hora de captar inversiones para la comunidad.
Además, el departamento de Economía gestionó de forma errónea la comunicación del rescate concesional. Convocó a la prensa para detallar la adquisición, pero se olvidó de los medios digitales. Un error impropio de un consejero con una dilatada experiencia profesional en este ámbito.