Carlos Torres
Cataluña será el territorio más afectado por el brusco ajuste laboral que llevará a cabo el BBVA, presentado esta semana a los sindicatos. La entidad que preside Carlos Torres muestra de este modo una escasa sensibilidad con una comunidad autónoma que ni mucho menos es una plaza cualquiera en la reciente historia de la entidad. En la anterior crisis, BBVA protagonizó la mayoría de las operaciones de concentración de las antiguas cajas catalanas, con las absorciones de Unnim (Sabadell, Manlleu y Terrassa) y Catalunya Banc (en su día Catalunya Caixa), con lo que implantación en la zona se incrementó de forma significativa.
Por entonces, no faltaron quienes, con razón, apuntaron que BBVA se había transformado en un banco catalán, algo que incluso hubiera ido a más de haber fructificado la fusión con el Sabadell, que no llegó a buen puerto. Ya aquellas operaciones anteriormente citadas llevaron aparejadas traumáticos planes de cierre, con más de 600 oficinas afectadas. El plan actual pone por completo en tela de juicio el compromiso de BBVA con Cataluña.