Aragonès repite el error de Mas
Año 2006. Artur Mas pactó con José Luis Rodríguez Zapatero la presidencia de la Generalitat puenteando al PSC que, junto con Iniciativa per Catalunya y ERC, estaba trabajando en un nuevo tripartito. Zapatero convocó a Montilla al Palacio de la Moncloa y la reunión fue tensa. El primer secretario del PSC le espetó al presidente del Gobierno que “la sede del PSC está en la calle Nicaragua y no en la calle Ferraz”. A los pocos días se cerró el segundo tripartito y Montilla fue elegido nuevo presidente de la Generalitat. De nada le valió a Mas lanzar aquella campaña que decía CiU+ERC=Catalunya. Perdió por segunda vez la Generalitat.
Año 2023. Pere Aragonès pidió árnica a Pedro Sánchez para que el secretario general del PSOE obligara al PSC a firmar los presupuestos. La respuesta de Illa en Catalunya Ràdio: “Sorprende que los independentistas quieran pasar por Madrid para decidir cosas de aquí”. Fuentes socialistas afirman que los presupuestos están “en el aire, muy en el aire” por la falta de confianza con ERC, pero que lo que peor ha sentado en la calle Pallars ha sido la petición de Aragonès a Sánchez porque la consideran un desplante a Illa, que se lo ha tomado francamente mal. 17 años después Aragonès repite el error de Mas. Aún tiene margen en la negociación presupuestaria, pero en Pallars se repite un mantra: “No son de fiar”.