En medio de un momento de turbulencias en el empresariado catalán a raíz del desenlace de las elecciones en la Cámara de Comercio de Barcelona, una institución que a partir de ahora estará presidida por el independentista acérrimo Joan Canadell, la Academia Catalana de Gastronomía y Nutrición (ACGN) se ha convertido en un oasis para los ejecutivos.
Su presidente, Carles Vilarrubí, considerado el hombre de los negocios de la antigua Convergència, ha conseguido esta semana reunir a empresarios y políticos en otro Desayuno de cuchara, tenedor e invitado. El encuentro se ha celebrado en el Vía Veneto, uno de los emblemas de la burguesía local, y la ACGN ha recibido al director general de la Fundación Bancaria La Caixa, Jaume Giró.
El consejero de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, ha participado en el encuentro junto a otros políticos de JxCat como Xavier Trias o Felip Puig. El desayuno gastronómico también ha sido el primer evento multitudinario en el que ha participado Carles Tusquets, el único de los candidatos a la presidencia de la Cámara de Barcelona que no era de la ANC y ha conseguido una silla en el plenario en las últimas elecciones.
También han asistido el presidente del grupo Agbar, Àngel Simón, una de las compañías que patrocina la Academia, el director general de Fira Barcelona, Constantí Serrallonga, o el líder de la patronal de Terrassa Cecot, Antoni Abad, entre otros.
La limitada presencia de comensales femeninas ha sido la única crítica que, por el momento, ha recibido el evento. El pasado Desayuno de Cuchara, Tenedor e Invitado sí se hizo con una empresaria. Participó la líder de la patronal nacionalista Femcat, Elena Massot, consejera delegada de la inmobiliaria Vèrtix.