El Barça masculino tiene a Robert Lewandowski. El femenino, a Ewa Pajor. La delantera polaca, killer del equipo de Pere Romeu, es una de las estrellas del club azulgrana. El fichaje más caro de la historia de la sección, casi medio millón de euros. A sus 27 años, es toda una referente del Barça Femenino. En consecuencia, el artista urbano Diego Ojeda le ha dedicado un mural.
La obra se encuentra en una sala del polideportivo del Instituto de Cultura Europea. Se presentó en Polonia, ubicado en la Universidad Adam Mickiewicz. El objetivo de la pintura es dar un mensaje inspirador a las nuevas generaciones. Por ello, aparece junto a Pajor, que en la camiseta del Barça también luce el escudo de la selección, una niña con la nueva equipación azulgrana, su apellido y el globo terráqueo.
"Cada niña con una meta clara y mucha persistencia es capaz de conquistar el mundo, tal como lo ha hecho Ewa. Aunque esta obra está vinculada al fútbol, su mensaje trasciende el deporte y se amplía a cualquier ámbito de la vida", afirma Ojeda, autor de la obra.
Pajor, inspiradora
El artista quiere dar un mensaje universal, que trascienda barreras y vaya más allá del plano futbolístico. Y es que la obra se enmarca dentro de una colaboración con el historiador Filip Kubiaczyk, quien también es autor de tres libros sobre fútbol español. El último, 'Historia, género y poder. La cuestión del fútbol en España, 3'.
El propio Kubiaczyk fue quien pidió la creación de un mural que respondiera a los prejuicios y falta de reconocimiento que aún persisten hacia las mujeres en el fútbol: "Cuando Ewa firmó con el Barça, muchos cuestionaron su relevancia. Este mural no solo es un homenaje, sino también un mensaje contra los estereotipos de género en el deporte".
Rubiales y Tyson
No es la primera obra reconocida de este artista. Tras el polémico beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso en la celebración del Mundial conquistado por España, Ojeda realizó otro mural en el que aparecía el exdirigente de la RFEF dando un beso a Mike Tyson. Quería reflejar que, si hubiese sido un hombre, Rubiales no hubiera dado el famoso pico.