El Barça de basket es un equipo en construcción. Liderado por Roger Grimau, perdió la final de la Copa del Rey contra el Real Madrid, rival directo en la Euroliga y la Liga ACB. El grupo azulgrana tiene mucho margen de mejora y su manager general, Juan Carlos Navarro, espera más de, al menos, cinco jugadores. Dos de ellos, salvo sorpresa, no seguirán la próxima temporada en el Palau.
En diciembre, Navarro estalló tras encadenar el Barça siete derrotas en 10 partidos. "Hay actitudes que no se pueden aceptar en el Barça", dijo el máximo ejecutivo. El exjugador no dio nombres, pero el destinatario de sus críticas fue Willy Hernangómez.
El fichaje más caro
Hernangómez fue el fichaje estrella del Barça en el pasado mercado de verano. Tiene un contrato por tres temporadas en las que percibirá 12,5 millones de euros. Es decir, más de cuatro millones anuales. En ataque, es un jugador determinante, pero en defensa es muy blando. Y Grimau se ha desesperado con su escasa intensidad defensiva.
Navarro también estaba molesto con el rendimiento de Satoransky. El base checo, fichado hace un año y medio tras su aventura en la NBA, encadenó varias partidos con muy malos números y sensaciones. Con el fichaje de Ricky Rubio parece haberse espabilado.
Actores secundarios
El manager general del Barça de basket también esperaba más de Oscar da Silva. El ala-pívot alemán tiene contrato hasta junio de 2025, pero el club podría rescindirlo al acabar esta temporada. Da Silva sigue sin dar el esperado salto de calidad, aunque tiene más minutos con Grimau que, hace un año, con Jasikevicius.
Otro actor secundario del Barça es Oriol Paulí. El suyo fue un fichaje que suscitó muchas dudas. Es un buen jugador en defensa, pero en ataque es muy irregular. Goza de pocos minutos y acaba contrato en junio.
El capitán, muy irregular
Más sorprendente es el papel de James Nnaji, un pívot de 2.11 metros que la próxima temporada podría dar el salto a la NBA. Vive a la sombra de Willy Hernangómez y Vesely, quien acaba de renovar su contrato hasta 2026.
Navarro esperaba más de Hernangómez, Satoransky, Da Silva, Paulí y Nnaji. Y, posiblemente, también de Abrines. El capitán, lastrado una vez más por las lesiones, se ha mostrado muy irregular en el curso actual, aunque Grimau siempre ha destacado su actitud en defensa. El técnico, no obstante, confía en que recupere las mejores sensaciones en el tramo final de una temporada en la que el Barça se jugará la Liga y la Euroliga. Palabras mayores.