Vinicius se marcha del Santiago Bernabéu con la amargura de la derrota. El atacante brasileño sufrió enormemente la aplastante paliza del FC Barcelona (0-4), sobre todo por su incapacidad para superar la línea defensiva azulgrana. En ese mar de frustración volvió a ser protagonista de sus polémicas en el terreno de juego, donde se libró de ser expulsado por la permisividad de los árbitros.
Como es costumbre, el extremo del Real Madrid se hizo notar por sus constantes quejas a Sánchez Martínez, el árbitro principal del clásico en territorio madrileño. Tuvieron que pasar 80 minutos para que Vinicius recibiera la tarjeta amarilla --la primera del cuadro merengue-- por una falta sobre Pedri. Pudo haber sido expulsado en esa misma acción por criticar al colegiado de esa decisión, cuando era una zancadilla bastante clara.
Expulsión perdonada
Pero la situación más polémica fue a los dos minutos de la amarilla, cuando golpeó a Iñigo Martínez. La acción provocó el cabreo de Iñaki Peña, que pidió al árbitro la expulsión del delantero del Real Madrid. Sin embargo, Sánchez Martínez consideró que solamente debía recibir sanción el guardameta del FC Barcelona. La polémica ya estaba totalmente servida.
El clásico ha vuelto a demostrar que Vinicius tiene barra libre contra los árbitros. No solo por la permisividad que tiene con las duras entradas, sino también para criticar o menospreciar el trabajo de los colegiados. "Tu siempre igual", fue lo que dijo el internacional brasileño a Sánchez Martínez al recibir la amarilla. En otros jugadores eso habría significado la expulsión, pero en su caso representa una situación diferente.
Humillado en el clásico
El partido de Vinicius solo puede definirse como decepcionante. Se fue humillado del clásico a partir de la exhibición defensiva del Barça, donde lograron dejar a los delanteros del Real Madrid hasta 12 veces en fuera de juego. El extremo brasileño estuvo impreciso y frustrado por el juego de los culés, lo que le deja en evidencia a pocos días del Balón de Oro, donde teóricamente es el principal favorito.