El Real Madrid encarrila dos refuerzos vitales para Ancelotti

El Real Madrid no tirará la casa por la ventana este verano. Más allá del aterrizaje de Kylian Mbappé como agente libre tras abandonar el PSG, no planean grandes desembolsos para verano de 2024 en la capital. La entidad presidida por Florentino Pérez sí que ha puesto en marcha la renovación de dos emblemas del equipo madridista: Toni Kroos y Luka Modric.

Los contratos de ambos centrocampistas caducan el próximo 30 de junio, pero desde Valdebebas les han ofrecido un año más de vínculo a cada uno. Como manda la política de renovación con los veteranos de la plantilla, las extensiones se revisan anualmente. Pese a los temores de que prescindirían del centrocampista croata, en el Santiago Bernabéu han cambiado de parecer e incluso habrían alcanzado un principio de acuerdo.

Modric, actor secundario

Según desvelan Onda Madrid y Telemadrid, Modric y el club se habrían reunido en la ciudad deportiva en la tarde de este jueves 16 de mayo durante tres horas. Durante dicha cumbre, la institución le trasladó una propuesta de un año más, pero con una reducción salarial del 50%. Sus emolumentos actualmente se sitúan en unos 10 millones de euros netos.

El centrocampista de 38 años pretende poner el broche de oro a su trayectoria madridista y darse un último baile en la temporada 2024-25. A falta de oficialidad, ambas partes seguirán ligadas. Lógicamente, la edad pasa factura. Si bien el volante ha disputado 43 partidos (2.108 minutos) esta temporada con dos goles y siete asistencias, acumula casi tantas suplencias (21) como titularidades (22). Luka se ha habituado a un papel más secundario.

Kroos, fundamental

Caso distinto el de Toni Kroos, timón del centro del campo cuyas ausencias en el once se han debido más bien a las rotaciones. Este curso, el mediocentro alemán ha participado en 46 encuentros (2.977 minutos), 33 de titular y 13 como revulsivo. Ha celebrado un solo tanto, pero ha entregado nueve pases de gol. 

Para el técnico Carlo Ancelotti no hay discusión. El 8 madridista debe continuar vestido de blanco a sus 34 años. Por su parte, el medio oriundo de Greifswald tiene la sartén por el mango, con la potestad de decidir si le complace el ofrecimiento.