La vida fuera de los grandes resulta un cambio radical para muchos jugadores. No solo por la posibilidad de pelear por los títulos más importantes, sino también por el trato diferencial que pueden recibir de los árbitros. Esa disparidad tan abismal la han confesado Sergio Ramos y Álvaro Morata, quienes se han sorprendido con respecto al trato de los colegiados estando lejos del Real Madrid.
Las quejas de Ramos
El que fuera capitán del cuadro madrileño, Sergio Ramos, sorprendió a muchos con sus declaraciones después de un partido con el Sevilla. El central estuvo disconforme con la actuación arbitral en el empate (2-2) contra el PSV Eindhoven, sobre todo por algunas jugadas que fueron determinantes en el resultado. En este sentido, el de Camas señaló a los micrófonos de Movistar+ que "estastá el gol anulado, la falta al borde de la banda... La gente dirá lo que quiera, pero el respeto a todos los equipos no es el mismo, y en este caso me toca y nos toca sufrirlo como sevillistas".
Posteriormente, Ramos compartió un mensaje en su cuenta de Twitter que denotaba su todavía cabreo con el arbitraje: "Un empate con sabor agridulce: un punto valioso fuera de casa, pero dos que se nos han escapado por pequeños detalles. Toca seguir trabajando y mejorando. Y una pequeña reflexión: ¿Para qué están las herramientas si no se usan?".
Morata coincide con Ramos
En esa misma línea también ha hablado Álvaro Morata. El delantero español concedió una entrevista a la cadena Cope, en donde fue preguntado si recibió un mejor trato de los colegiados cuando vistió la camiseta del Real Madrid. Si bien su respuesta no fue tan clara como la de Ramos, lo cierto es que tampoco deja margen de dudas: "Tú ya sabes la respuesta. Y todo el mundo también la sabe".
Resulta curioso que dos jugadores que formaron parte del cuadro merengue salgan con declaraciones que destapan esa balanza inclinada por parte de los colegiados, en especial en una época en la que se ha focalizado demasiado la crítica al FC Barcelona con respecto al caso Negreira, aunque todavía no existe una sentencia. Lo cierto es que