El Atlético de Madrid ha recuperado el rumbo con una victoria convincente en el derbi capitalino, ante el Real Madrid (3-1). Carlo Ancelotti tendrá pesadillas con el juego aéreo, pues dos cabezazos de Álvaro Morata y otro de Antoine Griezmann han amarrado los tres puntos en el Wanda Metropolitano. El conjunto merengue pierde el liderato y queda un punto por detrás del Barça y el Girona. El equipo azulgrana empata a 16 puntos con el cuadro gerundense al frente de la clasificación de Liga.
El conjunto rojiblanco ha dominado en el marcador durante un primer tiempo vibrante, con alternativas de ambos equipos. A los 4 minutos Álvaro Morata ha abierto la lata. Samuel Lino ha estrenado a lo grande titularidad liguera como extremo izquierdo al perfilarse desde su banda hacia dentro. El ariete madrileño se ha desmarcado entre los centrales, y el ex del Valencia le ha puesto un centro teledirigido. La cabeza de Morata, un imán para los balones, ha mandado el caramelo de su compañero al fondo de las mallas.
Ni 10 minutos se han cumplido cuando Jose María Giménez ha rozado el segundo tanto del encuentro, también con la testa. Bendito juego aéreo que pensaría el Cholo pasado un cuarto de hora. Lino ha vuelto a iniciar una jugada exitosa. El futbolista brasileño ha abierto en profundidad para Saúl Ñíguez, que ha colocado un nuevo centro por el costado izquierdo. En el área esta vez esperaba Griezmann, que también se ha impuesto por alto.
Despierta el Madrid
Tras verse dos goles abajo, los pupilos de Carlo Ancelotti han empezado a asomar la cabeza. Eduardo Camavinga mediante un tiro lejano y Fede Valverde, de cabeza, han probado a Jan Oblak. El Atleti ha respondido por medio de Koke, que ha rematado un centro de Marcos Llorente obligando a Kepa a lucirse.
El intercambio de golpes ha precedido el gol blanco. En el minuto 35, Toni Kroos ha recibido en la frontal del área, ha amagado con el disparo de izquierda y ha puesto un tiro raso y potente fuera del alcance del guardameta esloveno (2-1). Habría empatado Camavinga al filo del descanso, de no ser por un fuera de juego de Antonio Rüdiger, que ha estorbado a los zagueros rivales.
Nuevo despiste
Si la primera parte ha evidenciado los problemas del equipo merengue con el juego aéreo, la segunda ha seguido el mismo guion. Nada más arrancar el segundo tiempo, Morata ha hundido de nuevo las aspiraciones del Madrid. Otro centro lateral salido de las botas de Saúl ha encontrado al delantero exmadridista, totalmente solo en el área pequeña ante la pasividad de Camavinga.
Ancelotti ha sacado toda la artillería disponible en busca de la reacción. Joselu, Ferland Mendy regresado de lesión, Nacho y Aurélien Tchouameni han relevado a Luka Modric, Fran García, Lucas Vázquez y Camavinga. Tras verse nuevamente dos goles abajo, las naves blancas han puesto la velocidad de crucero. Los soldados del Cholo, acostumbrados a atrincherarse a defender las victorias parciales, han retrasado líneas.
No sin antes amenazar por alto. En un saque de esquina, Mario Hermoso ha estrellado su cabezazo contra el larguero. El Madrid ha empezado a probar suerte desde fuera del área ante la acumulación de camisetas rojiblancas alrededor de Oblak. Rudiger ha mandado fuera por poco un trallazo raso, y Tchouameni ha rematado desde el pico del área con el mismo resultado. Ni una pizca se ha movido el marcador. Hace falta más para perforar un arco defendido por once guerreros que han obtenido el segundo triunfo en los últimos 15 derbis.