De Stamford Bridge al nuevo Camp Nou: Fermín López encuentra su mejor versión tras flirtear con el Chelsea

Tenía un apodo en la Masía: Fermín el pequeñín. El mote ya ha quedado anticuado. López solo da pasos agigantados en su carrera. A punto estuvo de tomar un camino diferente al del FC Barcelona el pasado verano, cuando un grande como el Chelsea tentó al mediocentro onubense con un salario muy elevado y un rol muy importante. Por suerte, Fermín se decidió por el equipo de sus amores.

El centrocampista de El Campillo fue una apuesta de la dirección de la cantera en 2016, cuando, a pesar de su corta estatura, creyeron en el talento inmenso que salía de la pedrera del Real Betis. Lo mismo sucedió en 2019. Con contrato por tres temporadas, el máximo para cualquier futbolista menor de edad, Fermín seguía siendo muy bajito y debía dar el salto a juvenil.

Se impuso el rigor. El jugador andaluz tenía mucho que decir y Xavi Vilajoana, directivo responsable del fútbol formativo, y Guillermo Amor, exdirector de relaciones institucionales del Barça, estuvieron presentes durante la firma. También, evidentemente, los padres, Fermín López y Lola Marín.

El mérito de Xavi

Lejos ya queda aquella renovación, con un paso intermedio por Linares, donde jugó con 19 años, finalizada la etapa como juvenil. El Barça consideró, en 2022, que lo mejor era una cesión para que el mediapunta siguiese con su formación y desarrollo en la Primera RFEF. Terminó aquella campaña con 12 goles y 4 asistencias. De vuelta en Barcelona, su futuro era incierto. Pero todo cambió con Xavi Hernández.

El técnico egarense pidió siete chavales con los que completar los entrenamientos de pretemporada del primer equipo. Allí ya quedó prendado con Fermín, que justó marchó al Linares. El staff no le perdió la pista. El Barça ganó la Liga y el centrocampista azulgrana su puesto en el primer equipo en los próximos meses. Viajó a Estados Unidos y un zurdazo contra el Real Madrid cambió su historia para siempre.

Tres renovaciones en dos años

Fermín López, ahora, vive en su mejor momento. Pero no ha parado de crecer y lo demuestran las tres renovaciones que ha firmado en los tres últimos años. La primera llegó en 2022, justo antes de marcharse al Linares. La segunda ampliación se produjo el 29 de agosto de 2023. Fermín aceptó una extensión de contrato con el Barça hasta el 30 de junio de 2027, que, por rendimiento, tuvo que ser actualizada en 2024.

López será jugador del Barça, con una cláusula de rescisión de 500 millones de euros, hasta el 30 de junio de 2029. Firmó en octubre, poco después de convertirse en internacional y doblar su presencia con la Roja, en la Eurocopa y luego los Juegos Olímpicos. La ascensión fue meteórica.

El Chelsea y el centenario

Ahora bien, al cabo de unos meses, el nombre de Fermín volvería a ser protagonista en los despachos y no precisamente para sellar su continuidad. El club no quería vender a nadie, pero la venta de dos canteranos como Marc Casadó y Fermín López hubiera significado un gran beneficio, con el Fair Play atando de pies y manos al Barça. Sin embargo, sin un recambio, la dirección deportiva no quería desprenderse de nadie.

Fermín, el pasado 10 de agosto, cuando terminó como MVP del Gamper, aseguró lo siguiente: "No me iré del Barça. Me quedaré aquí. El Barça es el club de mis sueños. Podéis estar tranquilos, afición". No obstante, en las últimas horas de mercado reinó el silencio. Flick habló con el futbolista y quedó con la sensación de que no se marcharía. Así fue. El jugador de 22 años no pidió salir y la oferta del Chelsea fue insuficiente.

El canterano culé tomó la decisión acertada. Ahora es el mediapunta titular del Barça y, el sábado, llegó a los 100 partidos como azulgrana, justo cuando pisó por primera vez el Camp Nou. Y marcó. Porque Fermín está de dulce y demostrando todo aquello que predijo Xavi. Lee el juego como pocos, se orienta bien y tiene un olfato impropio de un mediocentro. Esta temporada ya suma 7 goles y 4 asistencias. Cada 117 minutos, influye en el marcador. Este martes jugará en Stamford Bridge, pero con la camiseta del Barça. La del club de sus amores.