La temporada pasada, un partido contra el Villarreal lo cambió todo. El Barça perdió en Montjuïc. Encajó una manita en casa (3-5), un resultado que supuso la dimisión en diferido de Xavi Hernández. El equipo ha cambiado mucho desde entonces. No sigue ningún fichaje, solo Iñigo Martínez, y, entrenado por Hansi Flick, va como un tiro en la Liga.
Este domingo (18.30 horas), el Barça quiere conseguir su sexta victoria consecutiva en la competición doméstica y con el objetivo de olvidar el batacazo en el estreno en Champions contra el Mónaco (2-1). El club azulgrana ha vuelto al camino de la ilusión y la tranquilidad, pero el choque contra los groguets será una prueba de fuego por culpa de la plaga de lesiones.
Bajo mínimos
Además, a la larga lista de bajas hay que sumarle el nombre de Ferran Torres, que acabó expulsado en la anterior jornada. El delantero de Foios se suma a los Frenkie de Jong, Gavi, Fermín López, Marc Bernal, Ronald Araujo, Andreas Christensen como futbolistas que verán el partido desde casa.
Bajo este contexto, Flick, o se la juega con los jóvenes o saca a los de siempre. Este es el posible once del entrenador alemán para el Villarreal-Barça: Marc André Ter Stegen; Jules Koundé, Pau Cubarsí, Iñigo Martínez, Alejandro Balde; Éric García, Marc Casadó, Pedri; Lamine Yamal, Raphinha, Robert Lewandowski.
Al límite
Y es que, sacando la probable alineación titular, solo hay cuatro miembros más del primer equipo: Iñaki Peña, Ansu Fati, Pau Víctor y Pablo Torre. El Barça está bajo mínimos. Más aún si se tiene en cuenta que Casadó o Pedri el pasado sábado se entrenaron al margen, en el gimnasio, debido al gran esfuerzo que hicieron en Mónaco, solos en la medular.
Otros futbolistas con mucha carga acumulada son Lamine Yamal o Pau Cubarsí, ambos con solo 17 años, Jules Koundé, Raphinha o Lewandowski. Los jóvenes formados en la Masía deberán dar un paso adelante. Flick no pone excusa. Los ve preparados para asumir el reto.