El Barça de Hansi Flick es una apisonadora. Al menos por ahora. Cuatro victorias consecutivas han consolidado al equipo azulgrana como líder en solitario de la Liga. Tras tres victorias sufridas contra Valencia, Athletic y Rayo --y un sinfín de ocasiones falladas--, el Barça se destapó contra el Real Valladolid (7-0). Flick, con la tranquilidad que otorgaba el resultado, hizo los cinco cambios.
En la segunda mitad, entraron Fermín López, Éric García, Ferran Torres, Pablo Torre y el debutante Sergi Domínguez. De los futbolistas disponibles, solo queda uno por tener minutos en el primer equipo: Héctor Fort. A pesar de ir ganando de forma holgada, el lateral derecho se quedó sin pisar el césped de Montjuïc. Flick, consciente de la situación, fue a pedirle disculpas personalmente tras el pitido final.
De momento, no ha trascendido cuál fue el mensaje del técnico del Barça a Fort, pero se pudo observar cómo le tranquilizó, le explicó los motivos de su estancia en el banquillo y luego se fundieron en un cariñoso abrazo, sobre todo por parte de Flick, con el que el jugador formado en la Masía recuperó la sonrisa. Seguro que pronto le llega la oportunidad.
Un entrenador cercano
A pesar de ser esquivo en rueda de prensa, de ser un hombre de club, de no dar grandes titulares, de su apariencia como un entrenador frío, todos los jugadores destacan que Hansi es un tipo muy cercano. El pasado sábado lo demostró con Fort. Tuvo empatía con el joven futbolista de 18 años.
Y es que, después de una buena temporada con Xavi Hernández, quien confiaba plenamente en el futbolista, Flick no le ha dado minutos a Fort. Incluso sonó Marc Pubill como futuro fichaje azulgrana, otro lateral derecho. Finalmente, el canterano se ha quedado en la plantilla. Hay que recordar de qué manera cumplió la campaña pasada, en campos tan complicados como el del Athletic o el Metropolitano.
Fort tendrá su oportunidad. Koundé lo está jugando todo y en algún momento deberá descansar. El inicio de temporada no está siendo fácil para él, pero acaba de cumplir la mayoría de edad y aún quedan muchos partidos. Flick fue el primero en pensar en el canterano. Se disculpó y consoló al chaval.