El final de la Eurocopa 2024, con la victoria de España (2-1) sobre Inglaterra, marca el inicio del intenso trabajo de Deco en las oficinas del Barça. El director deportivo azulgrana ha esperado a la culminación del torneo para pisar el acelerador en las negociaciones de dos fichajes que son fundamentales de cara a potenciar al equipo de Hansi Flick.
En este sentido, la prioridad de Deco es dar con un mediocentro y un pivote en el mercado de fichajes de verano. Los principales candidatos a ocupar las dos posiciones son Mikel Merino y Nico Williams, integrantes de la selección campeona de la Eurocopa. Ambos esperan sentarse con sus respectivos representantes para trazar una hoja de ruta con respecto a la siguiente temporada.
La prioridad del Barça
El fichaje que más anhela Joan Laporta en verano es Nico Williams. Su sobresaliente Eurocopa --gol en la final-- lo convierten en el principal reclamo del Barça para impulsar al primer equipo. El Athletic Club se cierra en banda a negociar, por lo que solamente es viable su incorporación si pagan los 58 millones de euros que corresponden a la cláusula de rescisión.
La última novedad revelada por Fabrizio Romano es que el FC Barcelona espera reunirse con el entorno de Nico Williams en los próximos días para presentar el proyecto y la oferta económica del contrato. El extremo ve con buenos ojos su fichaje por el club azulgrana, especialmente por su buena relación con Lamine Yamal, Pedri, Ferran Torres y Fermín López.
La negociación del nuevo acuerdo con Nike es clave en el desarrollo del fichaje de Nico Williams, debido a que esperan desbloquear 18 millones de euros y sumar hasta 100 millones en concepto de signing bonus. Se trata de una entrada de capital importante para que el FC Barcelona pueda entrar a la norma 1-1 y así afrontar una operación colosal como la del joven extremo español.
Merino gana enteros
El caso de Mikel Merino es mucho más favorable. El jugador de la Real Sociedad tiene un valor de mercado de 20-30 millones de euros, teniendo en cuenta que afronta su último año de contrato. La dirigencia del club vasco insiste en renovarle, pero crece el pesimismo por las pocas respuestas del mediocentro. El entorno del futbolista ha sido claro al expresar que una vez finalice la Eurocopa es que van a negociar el siguiente paso en su carrera, lo que mantiene alerta a Deco para empezar los primeros contactos dentro de pocos días.
El fichaje de Merino ha ganado fuerza por su bajo precio. Kimmich es el candidato que más gusta a Flick, pero en el club no están dispuestos a pagar 50 millones de euros. Esa situación ha provocado que el pivote español sume puntos en la dirección deportiva, además de su facilidad para adaptarse a un sistema ofensivo con dos futbolistas en el mediocentro.
Tampoco hay que pasar por alto que el propio Merino, en plena concentración con la selección en la Eurocopa, se mostró halagado por las informaciones que lo vinculan como posible jugador del Barça: "Habla muy bien de que haya interés, que esté haciendo bien las cosas, que estoy jugando a un buen nivel".