Ansu Fati quiere ganarse un lugar en la plantilla del FC Barcelona 2024-25. Ese gran objetivo es lo que ha motivado al canterano a empezar los entrenamientos antes del comienzo oficial de la pretemporada. El obstáculo más importante que debe superar el joven delantero es el overbooking de jugadores ofensivos que existe en el equipo de Hansi Flick, aunque el Benfica está cerca de realizar un enorme favor que va a reducir la competencia.
La prensa en Portugal ha informado en las recientes horas que el Benfica negocia con el Atlético de Madrid el traspaso de Joao Félix. La intención de la entidad lisboeta es recuperar a su hijo pródigo en el mercado de verano, por lo que están dispuestos a pagar hasta 30 millones de euros por el 50% de los derechos. El acuerdo entre clubes parece ser una realidad, aunque todavía esperan el visto bueno del futbolista representado por Jorge Mendes.
Ansu sonríe
El potencial traspaso de Joao Félix al Benfica juega a favor en los planes de Ansu Fati. Las limitaciones financieras del Barça obligan a la dirección deportiva a apostar por uno de los jugadores en el verano. La directiva de Joan Laporta confiaba en cerrar la cesión con el Atlético, pero el dinero ofrecido desde Portugal aleja a los azulgranas de mantener por otra temporada al Menino de Oro.
Joao Félix y Pedri González, coincidiendo sobre el césped con el FC Barcelona
Con ese panorama, la competencia por un lugar en el frente de ataque del equipo de Hansi Flick se ve reducida. Ansu Fati ahora tiene un panorama mucho más alentador para convertirse en uno de los extremos izquierdos de la plantilla en la próxima temporada. También es una buena noticia para el FC Barcelona, teniendo en cuenta que ahora pueden focalizar sus esfuerzos en nuevos fichajes.
Los planes del Barça
En caso de confirmarse la continuidad de un Ansu Fati que también es pretendido por el Sevilla de García Pimienta, el plan del Barça es potenciar a la banda izquierda con otro jugador que fomente la competencia por la titularidad. El gran candidato es Nico Williams, el fichaje soñado por la afición y por los altos mandos de la entidad azulgrana.
La junta de Laporta espera hacer los deberes en el mercado de verano para hacer frente a la cláusula de rescisión de 58 millones de euros. Ese es el principal freno que evita que Nico Williams sea futbolista azulgrana. Mientras tanto, Ansu Fati espera convencer a su nuevo entrenador de que es el perfil ideal para liderar el nuevo ciclo del Barça en la temporada 2024-25.