El FC Barcelona tiene un enorme problema con el Fair Play financiero. No hay certeza sobre la posibilidad de cumplir con los objetivos en el mercado de fichajes de verano. En la mesa hay soluciones como la renovación del acuerdo con Nike o un nuevo inversor para Barça Studios. Dos operaciones que se consideran fundamentales en la junta del club; sin embargo, es clave que consigan dar salida a aquellos futbolistas que no entran en los planes de la temporada 2024-25.
Dentro de ese listado de potenciales bajas se encuentra un jugador que amenaza con amargar a la directiva de Joan Laporta en verano, teniendo en cuenta que goza de un salario anual de 16 millones de euros. Ese contrato tan desorbitado --y que es heredado por la anterior dirigencia-- corresponde al de Clement Lenglet. El central francés está llamado a ser una de las principales ventas del mercado, aunque apunta a ser una carpeta que puede tardar semanas en resolverse.
Lenglet no tiene prisa
La esperanza de la cúpula azulgrana era que Lenglet consiguiera rendir en su año de cesión con el Aston Villa, pero finalmente no pudo asentarse en el equipo de Unai Emery que clasificó a la UEFA Champions League. El zaguero será uno de los jugadores que formará parte de las primeras semanas de entrenamiento de Hansi Flick y tampoco se descarta que entre en la gira de pretemporada en Estados Unidos.
El motivo es que Lenglet no tiene prisa por resolver su futuro. El jugador ha recibido la tentación de jugar en Arabia Saudí, pero su deseo es seguir jugador en el continente europeo. Esa situación provoca que el FC Barcelona se vea en el peligroso escenario de lidiar con un central que ya no atrae demasiado a los grandes equipos, especialmente por tener un salario de 16 millones de euros brutos que se aleja de la realidad de muchos clubes.
La alternativa del Barça
De no concretar la venta del central galo, la alternativa del Barça de Laporta es aceptar una nueva cesión en la que asumirían una parte importante de la ficha, tal y como sucedió en el verano pasado con el Aston Villa. En aquella operación, el equipo inglés solo asumió cinco millones del salario de Lenglet, por lo que el club azulgrana igualmente tuvo que enfrentarse a un enorme gasto.
Hay que recordar que Lenglet todavía tiene contrato con el FC Barcelona hasta el 30 de junio de 2026. Es un caso difícil de gestionar para la directiva de Laporta en una época en la que necesitan subir rápidamente los ingresos y también deshacerse de ese peso que no quieren en el equipo de Hansi Flick.