El FC Barcelona tiene dos prioridades en el mercado de fichajes veraniego de 2024: un pivote y un jugador de banda. Así lo aseguró el presidente Joan Laporta durante su intervención en su programa de Barça One. En función del margen salarial y las imposiciones del Fair Play financiero, el director deportivo Deco firmará un mediocentro low-cost o un 5 más económico y otro con credenciales para la titularidad. La operación para jubilar a Robert Lewandowski, hombre de confianza de Hansi Flick, no adquiere urgencia hasta 2025.
Aun así, el club azulgrana ya negocia la contratación de un nueve con vistas a la temporada 2025-26. Para entonces, el contrato del delantero polaco habrá llegado a su fin y su último año opcional dependerá de su participación en el 55% de los partidos. Así, las conversaciones empezadas por Xavi Hernández y su staff no quedarán en papel mojado. El técnico de Terrassa ya había dejado atada la incorporación del relevo de Lewy.
Fichaje atado por Xavi
Como ya desvelamos en Culemanía, Xavi ya pensaba en un cambio generacional en la punta de lanza. El estratega catalán no quedó satisfecho con el los esfuerzos defensivos de Lewan. Tampoco le terminaron de convencer las actuaciones de Vitor Roque, demasiado verde para la élite europea. De ahí que buscaran una nueva pieza para la delantera. Y en el ya excuerpo técnico del Barça reinaba el convencimiento de que la operación no sería costosa.
El nombre del goleador se desconoce hasta la fecha, pero pocos killers encajan con la descripción. Básicamente, los dos máximos contendientes en la pugna por el Pichichi de la Liga 23-24: Artem Dovbyk y Alexande Sorloth. Otros nombres anotados en la secretaría técnica como Julián Álvarez y Darwin Núñez tienen contratos de larga duración hasta 2028. Por lo tanto, fichar a estos dos últimos costaría, como mínimo, 70 millones.
Delantero por 40 millones
En cambio, Dovbyk, tiene una cláusula de rescisión de 40 millones de euros. Un precio más asequible por el máximo realizador del campeonato español, con 24 goles y 8 asistencias en 36 partidos. Si bien el ariete de 26 años tiene vínculo hasta 2028, el precio de su libertad acerca su salida para verano de 2024.
Del mismo modo, Sorloth es una auténtica ganga para los tiburones europeos. El goleador del Villarreal a sus 28 años cuesta 38 millones, como estipula su contrato. La cosecha realizadora del atacante noruego se asemeja a la de su homólogo en Girona: 23 goles y 6 asistencias en 34 encuentros de competición doméstica.
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