Hansi Flick tiene las ideas muy claras. Todavía no ha decidido su lista de altas y bajas. Algunos casos los tiene claros, otros no tanto. Uno de los futbolistas sentenciados por Xavi Hernández, Vitor Roque, tendrá una segunda vida en el Barça. El técnico alemán, en principio, cuenta con él.
Vitor Roque tuvo un protagonismo muy secundario con Xavi Hernández. Apenas jugó 16 partidos, casi siempre como suplente, y solo marcó dos goles. El técnico de Terrassa consideraba que estaba muy verde y era partidario de cederlo un año a otro club. Flick, en cambio, quiere tenerlo bajo su control. Al menos, en pretemporada.
El malestar de Cury
Flick considera que Vitor Roque puede ser un jugador muy útil como relevo de Lewandowski. El brasileño es muy distinto. Es un delantero rápido, pero con poco cuerpo. En julio y agosto tendrá el reto de seducir al técnico alemán.
La marcha de Xavi ha sido muy bien recibida por Vitor Roque y su representante, André Cury. Recientemente, el agente brasileño aseguró que el delantero no iría cedido a otro club. O se quedaba en el Barça o era traspasado. Y se mostró muy crítico con las pocas oportunidades que tuvo el futbolista.
Cambios en ataque
Xavi, por su parte, alegaba que Vitor Roque llegó al Barça en mala forma. Se recuperaba de una lesión y no tenía ritmo. El cambio del fútbol brasileño al español también precisa un tiempo, sobre todo para un jugador de 18 años que, además, acababa de casarse.
Flick, de momento, dará una oportunidad a Vitor Roque. En ataque está dispuesto a vender a Raphinha o Ferran Torres. Su gran objetivo es el fichaje de un extremo por la banda izquierda y el elegido podría ser Nico Williams, que costaría 50 o 60 millones de euros. Mucho dinero para un Barça en crisis.