Xavi Hernández relevó a Ronald Koeman en noviembre de 2021. Sabía que el técnico holandés lo había pasado mal en el Barça, pero no se imaginó la dimensión de su sufrimiento. Hasta que un día coincidieron en un restaurante y Xavi se sinceró: "Ahora entiendo lo mal que lo pasaste", le dijo.
Xavi, hoy, vive una situación muy parecida a la de Koeman en mayo de 2021. Tras una comida en el Via Veneto, Laporta le comunicó que sería despedido si encontraba un entrenador mejor. No solo comunicó su plan al técnico, sino que también lo anunció a los medios de comunicación.
Guardiola y Flick
Laporta, sin embargo, no logró seducir a Pep Guardiola para que regresara al Barça. También charló con Hansi Flick, pero dudó mucho. Y Koeman fue ratificado poco después. El héroe de Wembley, sin embargo, ya no tenía la autoridad de su primer curso como entrenador del Barça. Un curso que comenzó con Josep Maria Bartomeu como presidente.
En sus primera temporada como entrenador del Barça, el equipo de Koeman ganó la Copa del Rey. Y luchó por la Liga hasta el final. En el segundo ejercicio, sin embargo, las cosas fueron de mal en peor y el presidente destituyó a Ronald tras la derrota en el campo del Rayo Vallecano.
El lamento de Koeman
Antes, Koeman había hablado claro. Prometió ilusión, pero no títulos con un equipo que no podía renovarse como él quería. "Es lo que hay", dijo tras una derrota del Barça, que ya no podía competir con el Real Madrid y los grandes clubes de Europa.
Casi tres años después, Xavi también ha recordado que el Barça no puede fichar ahora a los futbolistas que quiere el entrenador y que es inferior a los grandes equipos continentales. Sus palabras molestaron a Laporta, decidido a despedirlo cuando termine la temporada. De momento, la esperada reunión entre el presidente y el entrenador se ha aplazado.
La espera de Xavi
"Me imagino que tendremos que hablar de alguna manera con el presidente. El vicepresidente Rafa Yuste me transmitió calma y tranquilidad el otro día. Nadie me ha dicho lo contrario a lo que dijimos hace tres semanas", comentó Xavi en la rueda de prensa posterior a la victoria del Barça ante el Rayo.
"El presidente siempre me ha ido de cara. Seguro que lo será cuando nos veamos", añadió Xavi, vitoreado por una grada más dividida con Laporta. Y el presidente, cada vez más cuestionado, busca nuevos estímulos para ilusionar a la afición del Barça. El discurso realista penaliza.