Raphinha es la definición de irregularidad. Su temporada con el FC Barcelona ha está muy lejos de ser positiva, especialmente porque sus flojas actuaciones se hacen notar de forma evidente. La última prueba de ello se pudo contemplar contra el Athletic Club, donde no fue capaz de marcar diferencias para tratar de ayudar a los suyos en un encuentro que resultaba fundamental en las aspiraciones por luchar en la Liga.
Contra el Getafe, el atacante brasileño pudo dejar un partido notable por su aportación de un gol y una asistencia. Sin embargo, en San Mamés no se vio ni de cerca esa versión del mencionado futbolista. No intentó ni un solo regate en los 76 minutos que estuvo en el terreno de juego, apenas aportó con 16 pases y perdió el balón en 13 oportunidades. Una de sus peores presentaciones en lo que llevamos de curso.
Esa falta de contundencia de Raphinha en los partidos importantes es lo que provoca que sea considerado por la dirección deportiva como una potencial venta para el mercado de verano. Xavi Hernández valora al extremo por su intensidad y presión en los metros finales, pero no es suficiente para sostenerse en el FC Barcelona, por lo que podría estar entre los principales candidatos para abandonar el club en los próximos meses. Y menos después de haber pagado 58+7 millones de euros por él.